Antes de la Mesa y Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra, en representación de UPN, Carlos García Adanero criticó que "parece ser que EA tiene intención de cederle las siglas a Batasuna-ETA para presentarse a unas elecciones y en ese sentido no hay que olvidar que EA forma parte de NaBai".

Así, García Adanero criticó que "estaríamos hablando, si nadie de NaBai dice lo contrario, de una cesión de siglas de EA-NaBai a Batasuna-ETA". "Si eso se produce, estamos ya cerca de que en las próximas elecciones quien lidere NaBai sea Batasuna-ETA, porque no hay que olvidar que el Tribunal Supremo ya estableció que era lo mismo", concluyó.

Por su parte, el portavoz parlamentario del PSN, Samuel Caro, afirmó que en el acuerdo establecido se echa en falta "una exigencia clara y contundente de la izquierda abertzale y de la propia EA a ETA de que deje las armas de una vez por todas y de que si quiere participar en política lo haga por la vía democrática". "Mientras eso no se escuche, este tipo de iniciativas lo que hacen es hacer perder el tiempo a la sociedad española en general", añadió.

Para Caro, el pacto de ayer fue "una nueva escenificación que, desde luego, al Partido Socialista no le complace en absoluto". Así, insistió en que "pocas valoraciones se pueden hacer", ya que "lo que se espera es que alguien definitivamente acabe pidiéndole a ETA que entregue las armas y eso no se ha producido".

"Me quedo con las declaraciones del ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que viene a decir que se va a seguir combatiendo a ETA con las armas que nos proporciona el Estado de Derecho. Lo que sabemos de ETA es que lo único que sigue intentando es reorganizarse", destacó.

En representación de IUN, Ana Figueras, afirmó que su partido "respeta" que cada grupo pueda establecer acuerdos, pero insistió en que "se tiene que dar un paso adelante y condenar sin paliativos el terrorismo de ETA".

Por otra parte, valoró que "cualquier negociación" debe pasar por "lo que tiene que ver con posibles soluciones a la situación de crisis. "Lo importante es hacer propuestas para salir de la crisis no desde el punto de vista nacional, sino europeo y mundial", puntualizó.

El portavoz parlamentario de CDN, José Andrés Burguete, expuso que en ese acuerdo "ha habido más bien pocos avances" y destacó que "no son momentos de palabras, sino de hechos, de rechazar la violencia". "Mientras no se dé ese paso, Batasuna no tiene cabida en las instituciones democráticas", defendió.

Asimismo, Burguete pidió a los poderes del Estado que ese acuerdo "no se use como un subterfugio para que Batasuna esté en las elecciones sin condenar la violencia".

Proceso de normalización

Sin embargo, el portavoz parlamentario de NaBai, Patxi Zabaleta, valoró que el acuerdo es "un paso más en el proceso de normalización política, al margen de las carencias o de las especificidades que pueda tener o dejar de tener".

Además, Zabaleta manifestó su "respeto y valoración positiva" a las declaraciones del presidente del PSE, Jesús Eguiguren, quien defendió la conveniencia de "incentivar" la apuesta de la izquierda abertzale por las vías políticas.

A su juicio, las declaraciones de Eguiguren "son no sólo responsables, sino realistas, ya que se están dando pasos nuevos". "En cada uno de estos pasos existen aún carencias, aportaciones, y vaivenes, pero en conjunto todas estas etapas, que ninguna de ellas es aún la etapa final, constituyen un avance no sólo a respetar, sino también a tomar en consideración".

Preguntado por la ausencia de una condena de la violencia en el acuerdo, Zabaleta afirmó que "no aparecen tampoco muchas otras cosas, como una declaración expresa de la paz como objetivo político", pero sostuvo que "eso no enerva ni desvirtúa el acuerdo al que han llegado ambas fuerzas".

Por otro lado, señaló que desde NaBai, ciñen ese acuerdo a "la actuación política del grupo de EA, que no comprende a NaBai en su conjunto, sino a EA". Además, añadió que "no cabe ninguna duda del compromiso histórico y actual de EA con respecto a la lucha por la paz, a la utilización de los cauces exclusivamente políticos y la defensa de todos los derecho humanos, civiles y políticos, y creemos que también Batasuna está dando pasos en ese mismo sentido".