El jurado popular ha declarado por unanimidad culpable de un delito de asesinato al ex guardia civil Jaime Máiz Sanmartín por matar en diciembre de 2007 en el Cuartel de Cambados (Pontevedra) a su ex pareja Mari Luz Posse con su arma reglamentaria.

Según el veredicto alcanzado hoy, leído en la Audiencia Provincial de Pontevedra, el jurado popular considera que el ex agente, que fue suspendido tras cometer el crimen en el cuartel en el que estaba destinado, mató a la víctima sin que ésta tuviera capacidad de defensa por su parte y "era consciente" de lo que hacía.

En el cuestionario, que estaba compuesto por 18 preguntas, el jurado ha considerado que el delito era un asesinato por la intención de matar y por ser un arma la utilizada contra la cual no te puedes defender. También estimaron la circunstancia mixta de parentesco, considerando que era una agravante toda vez ha mantenido una relación de afectividad durante mucho tiempo y que hacía poco tiempo que lo habían dejado, unos meses antes del crimen.

En cuanto a la alcoholemia, el jurado consideró que "no ha lugar" porque ésta no influyó en sus aptitudes, básicamente porque no modificó la trayectoria del disparo puesto que cambió la trayectoria del disparo apuntando con un brazo firme y esquivando a un compañero, para darle a la víctima, entre otras razones.

No creen tampoco que haya ningún tipo de minusvalía psíquica al entender que ya estaba dado de alta, que lo habían examinado unos forenses y estaba en pleno conocimiento de sus facultades mentales, tanto por el hecho como lo hizo como por la reacción que tuvo después.

Asimismo, determinó que tampoco hubo una dilación indebida en el proceso, algo que la defensa de Jaime Máiz incorporó al juicio 'ex novo' para beneficiarse de la tardanza del proceso, con una rebaja.

El jurado tuvo en cuenta que fue un procedimiento complejo, por lo que entiende necesario el tiempo que se tardó hasta hoy. Por último, considera que no cabe el indulto.UNANIMIDAD

Ha sido un veredicto por unanimidad en todos sus 18 puntos, excepto en uno, en el que uno de los nueve miembros del jurado discrepó, en concreto, en el referente a la alcoholemia.

El veredicto ha estado "sobresaliente", valoró el abogado de la acusación particular Laureano Barreiro. "Lo han hecho concienzudamente y se puede decir que es un gran trabajo", subrayó.

Para el letrado de la familia, el veredicto "ha estado muy bien fundamentado" y si se ha dilatado tanto fue porque el jurado ha motivado "con gran detalle" cada una de las respuestas.

"Para nosotros era un caso de libro, ahora lo único es que se da la situación dantesca de tener a un criminal, a un asesino, en libertad", concluyó el abogado.

En libertad

Tras la lectura del veredicto y una vez concluida la sesión del juicio por asesinato, la jueza ordenó el desalojo de la sala y anunció la inmediata celebración de una nueva vista con el objeto de estudiar la imposición de las medidas cautelares que solicitaban tanto la fiscal como la acusación particular.

El auto dictado hoy por la jueza obliga a Jaime Máiz a comparecer, desde esta noche, tres veces al día en el juzgado o en el cuartel de la Guardia Civil de Ferrol, ciudad en la que reside su familia.

Así, deberá presentarse entre las 10.00 y las 11.00 horas, entre las 15.00 y 16.00 horas y entre las 21.00 y 22.00 horas. Además, le mantienen retirado el pasaporte y la orden de alejamiento respecto a la familia de Mari Luz Posse.

El auto coincide con las medidas solicitadas por la fiscal encargada del proceso, Carmen Novo, quien explicó a los medios de comunicación que las pidió "porque una prisión provisional no era procedente".

En cuanto a la petición de una pulsera localizadora, solicitada por la acusación particular, Carmen Novo señaló que "era muy difícil colocarla". "Además, conseguir una nos llevaría tiempo y creo que se necesitaría el consentimiento de él dada la situación en la que está", aseveró. "Esperemos que estas medidas sean suficientes. Seguridad nunca hay y de momento es lo único que se puede hacer", concluyó.