Por ese bagaje, Saramago, según un comunicado remitido por la Oficina del Portavoz del Gobierno andaluz, fue merecedor del Título de Hijo Predilecto de Andalucía en 2007.

En opinión del presidente de la Junta, la pérdida de Saramago es hoy una "página de luto para la literatura por su condición de figura universal de las letras, una dimensión que alcanzó por la fuerza de los hechos, el deslumbramiento de su pensamiento convertido literatura, más allá de su condición de Premio Nobel de Literatura en 1998".

Saramago, según el presidente, deja para la historia de las letras una ingente e impresionante producción literaria, donde sus libros a partir de este momento, adquieren la condición de clásicos. Su trayectoria está jalonada, entre otros títulos, por 'El Evangelio según Jesucristo', 'Memorial del Convento', 'Ensayo sobre la Ceguera', 'La Caverna', o 'El año de la muerte de Ricardo Reis'.

En toda su obra y trayectoria humana, según insistió José Antonio Griñán, sobresalen "el compromiso con la justicia social, la honestidad y la valentía, valores asociados a los intelectuales y que Saramago hizo suyos con el noble propósito siempre de remover las conciencias".