Galicia tiene potencial para realizar una instalación de 58 plantas de biogás mediante un aprovechamiento de subproductos ganaderos, pesqueros y cárnicos, que producirían electricidad para unos 58.000 hogares —con un consumo medio de 4.000 kilovatios hora al año— según un estudio cofinanciado por el Ministerio de Ciencia e Innovación.

En rueda de prensa el jefe del Departamento de Calidad y Medio Ambiente de Ainia, Andrés Pascual, —centro tecnológico encargado del proyecto Probiogás— destacó que el potencial disponible de residuos agroindustriales en Galicia suponen 1.234.000 toneladas al año en materias primas. De las cuales, un 67 por ciento provienen de residuos ganaderos y un 33 por ciento de otros residuos como la transformación de productos pesqueros o subproductos cárnicos.

Estas cifras potenciales en Galicia se traducirían en 93 millones de metros cúbicos de biogás, que equivalen a unas 50.000 toneladas de petróleo.

En cuanto al potencial gallego por áreas, destacan el litoral de Pontevedra, la zona central de Lugo, y la capital de la provincia de Ourense, que supondría el 40 por ciento del potencial energético de Galicia en biogás.

En este sentido, Pascual presentó de manera coloquial al biogás como "un gas natural pobre", compuesto por metano y dióxido de carbono que se obtiene como resultado de la fermentación anaerobia de materiales orgánicos biodegradables. De esta manera, un metro cúbico de biogás equivale a la energía de 0,65 metros cúbicos de gas natural y puede llegar a producir 2,1 kwh de energía eléctricaFUNCIONAMIENTO

En una planta de biogás se realiza una mezcla equilibrada de distintos tipos de residuos de tipo ganadero, industrial, pesquero, vegetal o cárnico. Después de un pretratamiento de los elementos, se pone en marcha una co-digestión anaerobia en unos grandes reactores en donde se produce una fermentación que da lugar, por un lado, a biogás y, por otro, al llamado "digestato".

Tras esto, el biogás se lleva a un motor que produce electricidad y calor residual con este elemento como combustible. Pascual definió como "un elemento clave" a los digestatos resultantes, que podrán almacenarse para un empleo como fertilizante sólido o líquido. USC

Por su parte, uno de los investigadores de la USC que colabora con este proyecto, Juan Lema, resaltó que su grupo se centra en este proyecto en la mejora de las mezclas de residuos, así como en la procura de sistemas de control y la detección de organismos que permitan conocer el estado operativo de los equipos.

En la actualidad, existen unas cinco iniciativas empresariales de biogás en Galicia en alguna cooperativa e industria conservera, aunque "no son de co-digestión". Asimismo, Lema avanzó que "probablemente" pueda salir adelante un proyecto "grande" en la Comunidad gallega próximamente.

En lo referente al peso de materias primas potenciales para esta energía en Galicia en comparación con el Estado, los subproductos pesqueros suponen un 50 por ciento, los ganaderos un 2 por ciento y lo industriales un 5 por ciento. ESPAÑA

En el caso del Estado, Andrés Pascual destacó que las plantas de biogás "han crecido mucho" en Europa, aunque su empleo en España "es muy incipiente". Así, este proyecto PSE Probiogás —que tiene una duración de cinco años entre 2007 y 2011— cuenta con 28 socios de nueve comunidades autónomas como la Universidade de Santiago de Compostela (USC).

En total, el potencial disponible en España de los residuos agroindustriales suponen casi 49 millones de toneladas al año, en donde prevalecen los de tipo ganadero, lo que equivale a unos 2.600.000 metros cúbicos de biogás al año.

Por ahora, no se marcan plazos para la proliferación de plantas de biogás en el Estado ya que, según explicó Pascual, "se están desarrollando a su ritmo". En concreto, una planta de estas características tarda unos dos años en ponerse en marcha y, dependiendo de diversos factores, puede ser rentable en un periodo medio de entre cinco y diez años.