Cruz Roja Comunitat Valenciana atendió a un total de 415.693 personas en 2009, lo que supone un incremento del 19 por ciento y además de estas nuevas incoproraciones la crisis ha agravado la situación de las que ya asistía. Sin embargo, también se ha incrementado un 14,48 por ciento los voluntarios y un 5,50 por ciento los socios, lo que supone "un dato para la esperanza" porque en esta contexto socioeconómico "es la hora de los ciudadanos responsables", según informó hoy su presidente, Fernando del Rosario.

Al respecto, explicó que el recorte de recursos en España no ha paralizado ningún plan aunque sí que deja en el aire dos proyectos de cooperación internacional. Con todo, resaltó que la crisis tendrá un efecto positivo para ellos y es volver a darse cuenta de que la labor de esta organización se centra en el voluntariado y no tanto en la prestación de servicios directos. Y ahí mostró su optimismo ya que el 7 por ciento de los hogares valencianos está relacionado con Cruz Roja: 15.958 voluntarios y 113.016 socios.

Así, constató que el perfil de quienes acuden a Cruz Roja ha cambiado y cerca de la mitad son ya españoles, mientras que a los inmigrantes que ya daba asistencia se ha agravado su situación. Así, se refleja en el perfil del Plan de Empleo: 5.083 persona inmigrantes, pero también a 975 parados de larga duración, 238 mayores de 45 años y 1.107 mujeres en dificultad social, entre otros colectivos.

Del Rosario destacó que la importancia de este programa porque recuperar la dignidad de las personas p"asa por tener un trabajo, sentir que tiene un hueco en esta sociedad". Así, se consiguió 742 contrataciones en el mercado laboral, 100 menos que el ejercicio anterior y 25 autoempleos. Además, destacó que se ha implicado en estas 75 asambleas locales, en coordinación con administraciones públicas y otras entidades sociales, en este plan. Del Rosario resaltó que para estas personas, aunque no consigan un puesto de trabajo, es "muy importante saber que su problema le preocupa a alguien y que están acompañados en su búsqueda".

Entre los distintos programas resaltó la Atención a la dependencia a 4.950 personas con discapacidad y la lucha contra la pobreza y exclusión social que permitió proporcionar alimentación a 23.000 personas con más de un millón de kilos de alimentos.

Además, se atendió a 113.000 personas en el programa de intervención de emergencias, el más conocido, principalmente entre la asistencia en incendios e inundaciones y se aumentó la formación de los voluntarios y se ha consolidado la coordinación con la Administración Pública competente en materia de protección civil. Asimismo, durante este ejercicio se ha inaugurado el Centro logístico de emergencias en la Comunidad Valenciana ubicado en Oliva (Valencia).

Por su parte, en el área de promoción de la salud, se realizó una amplia labor preventiva sobre la Gripe A, con 18 intervenciones en aeropuertos valencianos, en la que "se preparó a la organización para poder afrontar el peor escenario posible". Asimismo, casi un centenar de voluntarios trabajan para actuar de puente entre las personas sin hogar para poder conectarlas con el sistema sanitario. Por otro lado, comentó que si hasta ahora el área de Medio Ambiente no era uno de los que más esfuerzos dedicaban esta situación ha cambiado por la estrecha vinculación entre cambio climático y pobreza.

Cooperación internacional

En Cooperación Internacional, se beneficiario 164.287 personas de 12 países. Uno de los proyectos emblemáticos gestionados con fondos valencianos es la lucha contra el tráfico infantil en África Occidental (Níger, Togo, Burkina Faso y Costa de Marfil) que ha logrado rescatar de las redes de explotación a más de 2.000 niños y niñas. No obstante, la falta de fondos deja en el aire la continuidad de este proyecto en Costa de Marfil.

Del Rosario subrayó que si a veces es difícil observar a corto plazo los resultados de la ayuda en estos programas los beneficios fueron inmediatos. Así, contó el ejemplo de las mujeres de Burkina Faso a quienes se proporcionó los instrumentos necesarios para que pudieran fabricar jabón de Karité y lo comercializaran ellas mismas y han conseguido exportar más de 100 toneladas a Francia y Canadá. No obstante, los problemas de financiación impiden extender este programa a una provincia limítrofe.

Además, se inauguró el Centro Logístico de emergencias internacionales de ayuda humanitaria en la Comunidad Valenciana ubicado en Cabanes (Castellón), que ha permitido dar respuesta a 4 llamamientos internacionales durante 2009.

Cruz Roja tiene presencia en 245 localidades de la Comunidad Valenciana, y cuenta con 75 asambleas locales, 15.958 voluntarios y voluntarias, 659 trabajadoras y 113.016 socios, lo que la convierte en una de las mayores redes de participación ciudadana y además subrayó que, en aras de la transparencia, todas las cuentas están auditadas sin encontrarse ninguna anomalía.