El consejero delegado de British Petroleum (BP), Tony Hayward, comparece este jueves en el Congreso de EE UU para informar del derrame de crudo causado en el Golfo de México por la explosión de una plataforma que gestionaba esa empresa el pasado 20 de abril. De momento, Hayward ha pedido por adelantado disculpas por toda la situación que se ha generado. "Lo siento profundamente", ha dicho al diario The New York Times.

Hayward ha comentado sentirse "apenado" por el desastre y ha reconocido el gran coste económico y humano que ha supuesto el vertido para el medio ambiente en el Golfo de México.

Duramente criticado en las últimas semanas, incluso por el presidente de EE UU, Barack Obama, el máximo responsable de la petrolera se enfrentará a un duro interrogatorio por parte de los legisladores.

En su discurso, anticipado unas horas antes por la empresa, Hayward dirá que el derrame en el Golfo de México es "inaceptable" y prometerá todos los recursos de su empresa para ayudar a resolver el problema.

"Nadie de nosotros sabe todavía por qué ocurrió el incidente. Pero sea cual sea la causa, nosotros en BP haremos lo que podamos para asegurar que algo así no vuelva a ocurrir", dirá Hayward, según el texto.

Tras enumerar las medidas presentes y futuras para tratar de poner fin al derrame, Hayward afirmará que "BP es una empresa poderosa que no escatimará esfuerzos" con ese fin. "Vamos a hacer todo lo que está a nuestro alcance para resolver plenamente las consecuencias económicas y ambientales de este derrame y asegurar que las lecciones de este incidente sirvan para hacer que la exploración y producción de energía sean más seguras y confiables para todos".