La consejera de Educación del Gobierno vasco, Isabel Celaá, consideró hoy que el Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación del Terrorismo tiene "suficiente aliento como para alcanzar su aplicación", y realizó un llamamiento a "la responsabilidad" de los partidos para que "acompañen" al Plan y no lo "obstaculicen".

En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, Celaá manifestó que, si el Gobierno cuenta con el apoyo de "la inmensa mayoría de las formaciones", como el PSE-EE, el PP, UPyD, el respaldo crítico de EB y "avances importantes" por parte del PNV, el documento "tiene el suficiente aliento como para poder alcanzar su aplicación".

"Si las fuerzas políticas, en una cuestión de tanta responsabilidad, optan, en vez de acompañar al Plan, por obstaculizarlo en el camino, tendremos dificultades", añadió. Por ello, realizó "una llamada a la responsabilidad", y señaló que este documento precisa "del compromiso y de la fuerza de todos".

La consejera afirmó que, cuando el Plan de Convivencia fue presentado en el Parlamento vasco, el PNV subrayó más los aspectos negativos que los positivos, "y esto no fue coherente" con lo que el Gobierno del PSE-EE y la formación jeltzale "habían vivido en la negociación". "Claramente, había una posición por parte del PNV de actitudes más positivas", señaló.

A su juicio, "un asunto de tanto calado como éste, que acumula tanto sufrimiento para nuestro pueblo", debería haber tenido "una formulación más en positivo" por parte de la formación jeltzale. En este sentido, echó en falta que el PNV dijera que iban a "impulsar" y a "acompañar" al Gobierno en este plan, aunque especificara sus "diferencias".

Acierto en los objetivos

"La formulación no fue lo suficientemente generosa ni coherente con lo que habíamos vivido en la negociación", manifestó, para lamentar que los jeltzales "incluyeran como diferencia incluso aquello que había sido objeto de acuerdo "como la convivencia conciliada y reconciliada, y algunos otros asuntos". "Más allá de los 'dimes y diretes' el Plan de Convivencia ha acertado claramente en los objetivos que propone", aseveró.

Isabel Celaá afirmó que se queda con las palabras del presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, realizadas antes de la presentación del Plan en el Parlamento, en las que aseguró que "algunas diferencias respecto a las víctimas no serían óbice para llegar al acuerdo y, sobre todo, afirmando que en el terreno de la educación, el acuerdo es satisfactorio".

En este sentido, subrayó que en la sociedad vasca ha ocurrido "un fenómeno absolutamente doloroso, que ha dado como resultado el asesinato de personas por opinión política". "No podemos mirar para otro lado al pensar que, efectivamente, esas personas que han asesinado a otros por su opinión política, han tenido apoyo social", apuntó. Por ello, consideró que eso se tiene que trasladar al ámbito de la Educación.