Tres escritoras suecas de novela negra desvelan el secreto de su éxito

  • Asa Larsson, Camilla Lackberg y Anna Jansson son las grandes diseccionadoras de la oscuridad.
  • Las tres nos explican por qué las historias policiacas 'made in Suecia' triunfan en el mundo entero.
Asa Larsson nació en Uppsala (Suecia) en 1966. Escribió su primera novela mientras estaba de baja maternal.
Asa Larsson nació en Uppsala (Suecia) en 1966. Escribió su primera novela mientras estaba de baja maternal.
EFE
Asa Larsson nació en Uppsala (Suecia) en 1966. Escribió su primera novela mientras estaba de baja maternal.

Asa Larsson: "Si hubiera tenido una vida feliz, no hubiera acabado siendo escritora"

Acaba de publicar en español Sangre derramada (Seix Barral), la segunda novela de la serie protagonizada por la abogada Rebecka Martinsson y cuya primera parte, la inquietante Aurora Boreal (Seix Barral), vendió sólo en España 250.000 ejemplares. (Asa nació en Uppasa (Suecia) en 1966. Escribió su primera novela estando de baja maternal).

Sus obras son lo más alejado del paraíso... Y no sólo las suyas, ¿no son los suecos esa feliz y avanzada sociedad que aquí imaginamos?

Muchos suecos no tienen ni idea de que aquí está tan idealizado su país. Aparte de no ser ningún paraíso, el género negro hace que entres en la parte más fea de la sociedad y la naturaleza humana. Creo además que nuestra cultura es un poco oscura. Soy del noroeste de Suecia y somos los ganadores de todas las encuestas sobre depresión. Entonces bebemos y es aún peor.

Ejerció usted de abogada como su protagonista, ¿sintió, igual que ella, que estaba malgastando su vida?

Rebecka ha perdido su camino, está huyendo de sus emociones y no se para a pensar en cómo se siente. Sólo trabaja, es su vía de escape. Yo también me he sentido así. Pero si hubiera tenido una vida feliz y una infancia feliz, no hubiera acabado siendo autora.

¿Cómo es eso de empezar a escribir en una baja maternal y acabar siendo un fenómeno mundial?

Tras mi primer parto, tengo dos hijos, me vi en casa con un bebé y una pequeña depresión. Me vi forzada a reflexionar. ¿Cómo podía estar tan triste con un bebé tan maravilloso? Y decidí hacer algo creativo, que fue escribir. Así empezó todo.

¿Había soñado con ser escritora?

Sí, mi padre era librero y adoraba los libros. Cuando yo escribía de niña él se fijaba mucho en mí, así que yo seguía escribiendo para seguir llamando su atención.

¿Es cierto eso que cuentan de que algunos de sus lectores abandonaron la secta en la que estaban tras leer Aurora Boreal?

No tengo constancia de ello. Lo que sí conozco es a personas que tras abandonar la secta a la que pertenecían leyeron mi libro y se pusieron en contacto conmigo para decirme que las cosas que vivieron: sexo con el pastor, opresión... eran tal y como las cuento.

¿Por qué son tan buenos ustedes en la novela negra?

La pareja Sjöwal y Wahloo [creadores de Beck] generaron una muy buena literatura negra en Suecia; creo que todo viene de ahí. Mis autores favoritos de este género son Kershn Ekmon y Henning Mankell. Y, aunque no sea de novela negra, Margaret Atwood.

Camilla Lackberg: "Matar adultos no me importa, pero con los niños y los animales me cuesta"

Ha conseguido vender más de seis millones de ejemplares de su serie de novelas policiacas (Las hijas del frío o La princesa de hielo, entre otras), y en España lleva ya más de 700.000. Ha venido a nuestro país a promocionar su obra Crimen en directo (Maeva). (Con 36 años Camilla Lackberg, que quería ser modelo, ha cautivado a medio mundo).

¿En qué se basa para sus historias?

Desde pequeña me interesan los crímenes. Siempre he leído historias reales y novelas policiacas, programas, documentales... Me interesa esa parte oscura del ser humano.

Tienen ustedes, los autores suecos de novela negra, un punto en común: una oscuridad casi magistral...

Es que no somos los suecos muy alegres, tendemos a ser depresivos y cuando uno escribe trata de abordar los fantasmas. El clima también nos afecta: es gris, tenebroso, oscuro.

¿Alguna explicación para que sea tan brillante la novela negra sueca?

Todo empezó con Sjöwal y Wahloo; establecieron un listón muy alto. Además, los suecos son muy buenos lectores, y esto también lo explica.

Otra de las reinas de su género es Asa Larsson... ¿Le gusta su obra?

Me encantan sus libros y también ella, es amiga mía. Es una de las mejores escritoras de novela policiaca en Suecia.

¿Cuáles son para usted los mejores autores de novela negra?

Los ingleses. Peter Robinson, Reginald Hill, Denisse Mina, Minette Waters...

¿Y Stieg Larsson?

Bueno, mi editorial en España está muy orgullosa de que yo haya sido conocida antes que Larsson. En otros sitios, como Francia o Inglaterra, lo he sido gracias a Stieg. Sus libros me encantan. No sólo yo debería estar agradecida, todos deberían. Además, como ha habido tantos problemas con su herencia, muchos, entre los que me incluyo, hemos hecho testamento.

¿Le sorprende su éxito en España?

Mucho, porque para los suecos éste es un mercado muy difícil. Antes que yo, la gran autora sueca Liza Marklund lo había intentado y no lo logró.

¿Lo pasa usted mal cuando escribe?

Sólo en las escenas en que hay niños. Matar adultos no me importa, es más, me lo paso bien, pero con los niños y los animales me cuesta. Lo que sí hago escribiendo es sacar toda mi agresividad, es como una sesión de yoga, por eso no voy al gimnasio. Nunca hago ejercicio, lo odio. Una amiga quiso invitarme una vez a una clase de yoga y le dije: "Invítame a comer o a una copa". Yo, ni drogas ni ejercicio. Vino tinto y comida, sí.

Anna Jansson: "Es mucho más interesante cuando el delito se comete en el paraíso"

Enfermera y escritora, esta superventas en su país (millón y medio de libros vendidos), acaba de ver publicada en nuestro idioma su novela Hablaré cuando esté muerto (Grijalbo). Promete convertirse en la tercera reina de la novela negra venida de Suecia. (Llega a España precedida por el éxito obtenido en Suecia. Anna Jansson nació en Gotland en 1958).

¿Qué espera que encuentre el lector español en su obra?

Espero que tengan un agujerito para ver a la sociedad sueca y también mi corazón. Porque yo sólo escribo sobre lo que de verdad me importa. Creo que lo que viene del corazón llega directamente al corazón. Sería para mí una pérdida de papel escribir de cosas que no me importan.

¿Y cómo es esa sociedad sueca de la que escribe?

De alguna manera es un paraíso: la sanidad es muy buena, no hay mucha corrupción en la política ni en la Policía. Y, claro, siempre es mucho más interesante cuando el delito se produce en el paraíso, y el asesino es el chico bueno.

¿Qué tienen en común y qué diferencia a sus dos colegas, Asa Larsson y Camilla Lackberg?

Las dos son encantadoras y me caen muy bien, pero es mejor escritora Asa Larsson.

¿Cuál es el secreto del éxito de la novela negra sueca?

Este boom empezó cuando muchos autores que estaban escribiendo otras cosas se pusieron a escribir novela negra. Y el éxito se debe a la calidad, al tono y a que hablamos de la sociedad real.

¿Está Suecia, como su obra, llena de oscuros secretos?

Sí, por supuesto. Como enfermera he estado 30 años trabajando de noche con enfermos de cáncer de pulmón, y me contaban historias que no habían contado a nadie. Esas historias me han dado un conocimiento sobre cómo puedes vivir tu vida.

Ha dejado de ejercer hace poco la Enfermería, ¿ha perdido con ello una fuente de inspiración?

Es que era imposible compaginar mis tres hijos, los tres hijos de mi pareja (mi anterior marido murió hace tres años), la escritura... Hace siete años no hubiera podido dejarlo y vivir de mis libros, pero ahora sí. Aunque lo echo mucho de menos. Me encantaba.

¿Qué escritores suecos de novela negra nos recomendaría?

Frimansson. Es la única mujer que escribía novela negra en Suecia antes del boom. Y también Karin Alvtegen. Tienen mucho talento.

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