El Centro de Investigación y Formación Agraria (CIFA) presentó hoy un proyecto de investigación para determinar y minimizar el riesgo sanitario asociado al uso agrícola de los efluentes en las explotaciones de vacuno de leche.

La presentación de este proyecto se enmarca en la 'Jornada Técnica sobre Gestión de Purines en Cantabria', celebrada en este organismo, dependiente de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad, cuyo titular, Jesús Oria, fue el encargado de presentar la ponencia de la investigadora del proyecto de investigación, Patricia Santorum.

Los objetivos de este proyecto han sido tipificar las explotaciones, en función del manejo de purines, y valorar la contaminación con nitratos y fosfatos procedentes de fuentes agrarias que implica el uso agrícola de los efluentes ganaderos.

Igualmente se ha analizado el riesgo sanitario presente en los efluentes ganaderos en función del tipo de explotación en el que se encuentran y del tratamiento que reciben, así como la incidencia de agentes zoonóticos y su correlación con indicadores.

Además se persigue evaluar el riesgo sanitario que conlleva la irrigación de cultivos forrajeros con los efluentes de estercoleros y el riesgo sanitario asociado a irrigación de praderas con purines.

Otro objetivo es realizar un estudio comparativo de los sistemas de tratamiento que limiten los riesgos sanitarios y medioambientales asociados al manejo de los purines, determinando el tratamiento más eficiente, el tiempo mínimo de tratamiento y seleccionando indicadores de contaminación fecal animal.

Finalmente, se redactarán una serie de recomendaciones para los ganaderos en relación al sistema de tratamiento de efluentes y de las prácticas agrarias, que permitan reducir los riesgos sanitarios.

Para ello y en el marco de este proyecto de investigación, se han estudiado los purines o estiércoles correspondientes a 32 explotaciones ganaderas de Cantabria.

Investigación prioritaria

El Consejo de Gobierno aprobó en el año 2003, entre otras, una línea prioritaria de investigación agraria sobre este aspecto a desarrollar desde el Centro de Investigación y Formación Agrarias (CIFA), dependiente de la Dirección General de Desarrollo Rural de esta Consejería, unidad que tiene asumidas las competencias en investigación agraria.

La directiva comunitaria relativa a la protección de las aguas contra la contaminación producida por nitratos procedentes de fuentes agrarias, conocida como la 'Directiva sobre nitratos', supuso una llamada de atención muy importante sobre la necesidad de reducir la contaminación causada o provocada por los nitratos de origen agrario.

Además, esta normativa ayudó a actuar preventivamente contra nuevas contaminaciones de dicha clase y a poner en marcha la activación de los mecanismos para ello, declarando las 'zonas europeas vulnerables' a esta contaminación. A partir de ella, y para su aplicación en España, se publicó un Decreto que establecía la necesidad de elaborar Códigos de Buenas Prácticas Agrarias, la Comunidad Autónoma también cuenta con uno específico.

A pesar de no tener ninguna 'zona vulnerable' en ese momento, el proceso de reconversión del sector lácteo en Cantabria llevaba inherente un proceso de intensificación de las explotaciones. Este proceso suponía una posible reducción de la superficie disponible por vaca, con el consecuente riesgo de contaminación por los nitratos procedentes de sus deyecciones.