Según informa la compañía, en un comunicado, del total de 15 empresa contratadas para esta labor sólo dos han sido de fuera de la ciudad y la comarca, dada la alta especialización de sus trabajos.

En total, cada uno de los trabajadores ha desarrollado, según una estimación realizada por Repsol, unas 28.000 horas de trabajo durante el tiempo que han durado las paradas.

La parada programada en dos de las unidades —coque y recuperación de azufre— se ha realizado para llevar a cabo las inspecciones reglamentarias, aumentar la eficiencia energética, cumplimiento medioambiental y mejora de la seguridad de las instalaciones.

En otras cuatro unidades se han realizado paradas técnicas para acometer reparaciones que no estaban inicialmente planificadas y que supondrán una mejora de la eficiencia del proceso de producción. Los trabajos de parada, con una duración de treinta días, concluirán la próxima semana.

La seguridad de todos los trabajadores que han participado en la parada es el principal objetivo de Repsol, según se indica, por lo que un grupo de seguridad formado por técnicos de prevención de la compañía ha mantenido reuniones diarias con los técnicos de seguridad de las empresas contratistas participantes para coordinar y mejorar la prevención de riesgos laborales.

Con la contratación en estas paradas de un importante número de trabajadores de empresas auxiliares de Puertollano, y otras medidas, Repsol "sigue cumpliendo el compromiso de minimizar las repercusiones de la parada temporal de la planta de olefinas y de diversas unidades del área química", señala la empresa.