Aznar pide obviar las "falsas expectativas" de ETA sobre una posible negociación

  • No quiere que "aquellos que ni condenan el terrorismo ni renuncian a su proyecto totalitario" lleguen a las instituciones.
  • Aznar no cree que todas las ideas sean legítimas en democracia "aunque se expresen al margen de la violencia".
  • El ex presidente rechaza la idea de que "los cómplices del terrorismo" vayan "a traer la paz".
José María Aznar junto a Felipe González y el ex primer ministro de Portugal, Mario Soares.
José María Aznar junto a Felipe González y el ex primer ministro de Portugal, Mario Soares.
Ángel Díaz / EFE
José María Aznar junto a Felipe González y el ex primer ministro de Portugal, Mario Soares.

El ex presidente del Gobierno José María Aznar pidió este lunes obviar las "operaciones de distracción" y el "juego" de "falsas expectativas" del entorno de ETA para llegar a una negociación, ya que son "un plato recalentado en la cocina" de la banda terrorista.

Aznar pronunció estas palabras en el acto de presentación del libro del diputado del PP Ignacio Cosidó, España, camino de libertad, editado por Gota a Gota, sello de la Fundación de Análisis y Estudios Sociales (FAES).

Acompañado por el líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, y por los demás ex ministros de Interior en su etapa al frente del Gobierno, Jaime Mayor Oreja y Ángel Acebes, el ex presidente ha pedido que "aquellos que ni condenan el terrorismo ni renuncian a su proyecto totalitario" lleguen a las instituciones.

La razón es que, a su juicio, "no todas las ideas son legítimas en democracia aunque se expresen al margen de la violencia".

"Una afrenta a las víctimas"

Habrá elecciones municipales en el País Vasco a finales de mayo de 2011, y por ello, Aznar instó a rechazar que la idea de que "los cómplices del terrorismo" serán "los que van a traer la paz", ya que eso supone "una verdadera afrenta a las víctimas y a tantos que han trabajado y siguen trabajando" por la libertad y la seguridad.

Por ello, el presidente de FAES afirmó que "alimentar falsas expectativas" sobre la necesidad de negociar con ETA o sobre el fin de la organización no es más que un "juego", la presentación, en definitiva, de "un plato recalentado de la cocina" de la banda. Por tanto, ha añadido, se trata de "operaciones de distracción".

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