Así se dio a hoy conocer en el transcurso del pleno extraordinario y de carácter urgente celebrado a primera hora de esta mañana para aplicar la medida siguiendo las recomendaciones de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), lo que se traduce, principalmente, en un descenso del nueve por ciento del sueldo del alcalde, del ocho por ciento para los tenientes de alcalde y del siete para los ediles de dedicación exclusiva.

La medida fue aprobada con los 23 votos a favor de los ediles del PP y el PSOE y los dos en contra de IU, que ha tomado esta posición por "coherencia política" después de que la formación haya mantenido la misma actitud contraria en el Congreso de los Diputados y el Parlamento andaluz.

Y es que a juicio del edil de izquierdas Francisco Puentedura el equipo de gobierno local está aplicando "mal" el decreto en cuanto que la masa salarial de los empleados públicos será reducida en un cinco por ciento, sin tener en cuenta "criterios de proporcionalidad" y sin consultar la medida con los sindicatos, pese a que también afecta a los empleados de las empresas públicas.

"Este decreto traslada los efectos de la crisis a 2.000 trabajadores del Ayuntamiento y es el mayor recorte social conocido en nuestro país", clamó el edil, quien vio injusta la medida porque no será aplicada a los altos cargos y los gerentes de las empresas públicas.

Puentedura también calificó de "insuficientes" los recortes salariales por considerar que en el caso de los miembros de la corporación municipal debía ser mayor y les instó por ello a retrotraer sus sueldos a 2003, año en el que se aprobó la última subida.

Por su parte, el grupo municipal del PSOE sí se mostró a favor de la medida y la enmarcó en el esfuerzo que están realizando las administraciones para reducir el déficit público, incluidas las de otros países como Alemania, que "ha reducido el salario a 80.000 funcionarios y ha despedido a 15.000".

Nuevos salarios

Finalmente, el portavoz del equipo de gobierno y edil de Economía y Hacienda, Juan Antonio Mérida, defendió la aplicación de este decreto de obligado cumplimiento que, según dijo, no servirá "para pagar deudas a los bancos" y se preguntó qué va a hacer en este sentido la Diputación de Granada, donde gobiernan en coalición IU y PSOE.

La aplicación de la medida, que quedará ya reflejada en la nómina de este mes, supondrá un descenso del nueve por ciento en el sueldo del alcalde de Granada, José Torres Hurtado, que pasará de cobrar 65.635 euros brutos anuales a 59.728, unos 5.900 euros menos.

Los seis tenientes de alcalde en el Consistorio sufrirán un recorte salarial del ocho por ciento y su sueldo bruto anual de 57.429 euros descenderá hasta los 52.834, unos 4.595 euros menos.

El recorte salarial del resto de concejales del equipo de gobierno (PP) y del PSOE con dedicación exclusiva será de 3.574 euros brutos anuales, ya que todos ellos perciben un sueldo de 51.770 al que se le aplicará una rebaja del siete por ciento, respetando así la tabla orientativa elaborada por la FEMP

Este recorte del siete por ciento no se extenderá a los dos ediles de IU, puesto que cobran menos que sus compañeros —unos 38.664 euros brutos al año— a raíz de que rechazaran aplicarse la última subida salarial aprobada en pleno, de modo que su retribución anual bruta será reducida en un seis por ciento hasta quedarse en 36.344, unos 2.320 euros.

A los funcionarios, cargos de libre designación y trabajadores de las empresas públicas se les recortará el sueldo un cinco por ciento.

Así las cosas, el Ayuntamiento prevé un ahorro en salarios de 1,8 millones de euros para lo que queda de año, teniendo en cuenta que el recorte se aplicará en la nómina de junio, y de tres millones para 2011.