Error de traducción

Lo mejor que se puede hacer con la decisión del servicio de traducciones de la Comisión de la UE es tomártelo con calma.
Dejar el español como lengua de segunda fila revela una miopía que ha impedido a los responsables de esa medida percibir, nada menos, que al continente americano. La lengua española no se limita a nuestra península, como ha demostrado el reciente congreso de Ávila, y al tener en cuenta la necesaria proyección de la Europa unida por el mundo se arreglará sin duda este despropósito.

Es probable que a gente poco informada les produzca confusión la campaña tenaz de nacionalistas catalanes y vascos tanto para incluir sus respectivas lenguas en la babel europea como su empeño en arrinconar al castellano, llegando al ridículo de algún museo catalán donde los letreros están sólo en esta lengua y en inglés. Afortunadamente, la noticia no parece haber llamado la atención de quienes pretenden expulsar al cava de las fiestas navideñas. Dejemos a la terquedad de los hechos poner las cosas en su sitio.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento