En cualquier caso, dejó claro que el rechazo del sindicato a la reforma laboral tal como se está planteando no se debe sólo a las condiciones que se proponen para "abaratar" el despido, ya que hay otros elementos que no pueden aceptar, porque les "crujirían los huesos los trabajadores, y con razón".

Por ejemplo, considera "inasumible" la propuesta de permitir a las empresas acogerse a la denominada 'cláusula de descuelgue' del convenio colectivo sin negociarlo con los trabajadores.

Cedrún recordó que esa cláusula permite a las empresas que atraviesan dificultades "descolgarse" temporalmente del convenio colectivo y rebajar sus condiciones. Pero lo que se pretende ahora es que puedan acogerse a esa posibilidad sin contar con los trabajadores, una condición que UGT "no puede aceptar".

También cuestionó que en los casos de despido objetivo se proponga que los jueces "no tengan nada que decir" y "no puedan decidir" si las causas alegadas por la empresa están suficientemente justificadas.

Por último, la secretaria general de UGT destacó que tampoco la patronal apoya la reforma según la plantea el Gobierno y, de hecho, afirmó que los empresarios han sido "los más contundentes" en el rechazo a la propuesta del Ejecutivo.

Cedrún se pronunció así a preguntas de los periodistas sobre la negociación de la reforma laboral en una rueda de prensa en la que informó de los asuntos analizados el miércoles en la reunión del Consejo Regional del sindicato.