Darias subrayó, en declaraciones a los medios, que el vestuario que desde hoy comenzarán a utilizar los agentes se ha elaborado de acuerdo a la experiencia acumulada en el uso operativo de las diferentes prendas y modalidades de los uniformes ya existentes.

Ahora, esta equipación ha sido actualizada y modernizada conforme a los patrones de confortabilidad, seguridad y prevención de riesgos laborales, de tal forma que conjuga la comodidad de uso y la operatividad con una imagen "más moderna" de la Policía.

Así, el uniforme de color azul marino está compuesto de una gorra con visera, más cómoda en su uso que la tradicional gorra de plato; una camisa modelo polo que une la resistencia con la comodidad y adaptación al trabajo policial; un pantalón con bolsillos exteriores en las perneras y botas negras que sustituyen al clásico zapato de suela. También se ha incorporado un jersey de pico corto para la temporada de invierno.

Estos uniformes comenzaron a utilizarse en Madrid y se están implantando en todo el territorio nacional hasta completar la plantilla de los 22.000 policías nacionales.

Darias se refirió en especial a las botas de este nuevo uniforme, con las cuales se "tratan de garantizar la seguridad, la confortabilidad y la operatividad en el día a día".

Por su parte, la jefa Superior de la Policía Nacional de Canarias, Concepción de Vega, resaltó que con este nuevo uniforme "han desaparecido todos los elementos que peligraban" en la operatividad en la calle, entre los que citó, corbatas o placas. Agregó que el tejido también "es especial", ya que es transpirable y antihumedad.