La Fiscalía y la acusación popular han elevado este miércoles a definitivas las peticiones de cinco años de cárcel para los principales miembros del grupo neonazi Blood & Honour (Sangre y Honor) por los delitos de asociación ilícita y de tenencia ilícita de armas.

En el penúltimo día del juicio contra 18 miembros de Blood & Honour en la Audiencia Provincial de Madrid, las acusaciones han sostenido que Roberto L.U. fue el auténtico líder de esta asociación que fomentaba la xenofobia y que para mantenerla se dedicaba a la compra y venta de armas de defensa ilegales.

La acusación popular, representada por el Movimiento contra la Intolerancia, solo ha pedido rebajar la pena a un año para Óscar F.N., acusado de vender las armas a Roberto L.U., por haber colaborado con la Guardia Civil.

El Ministerio Fiscal ha explicado que ha quedado suficientemente acreditado que Blood & Honour era una asociación que, en contra de lo afirmado en sus estatutos, no se dedicaba a conservar la cultura europea y a apartar a la juventud de la droga. Por el contrario, según la fiscal, este grupo tenía unos estatutos 'B' por los que se regía y en los que se hablaba de fomentar la "cultura blanca" y de tratar de incitar a personas, incluso ajenas a la asociación, a seguir el movimiento nacionalsocialista si no han caído antes en "la trampa sionista".

La Fiscalía ha destacado en sus conclusiones que este grupo tenía a Hitler como ídolo, un personaje que buscó el exterminio judío y, por ello, frente a la libertad de asociación, la Constitución también ampara el respeto a la dignidad humana y el evitar que las asociaciones como Blood & Honour generen peligros que puedan conllevar a la violencia. Ha recordado las grabaciones telefónicas -consideradas ilegales por las defensas pero admitidas por el tribunal- en las que se escucha claramente a Roberto L.U. definir al grupo como "nacionalsocialista" y "skin".

La triple función de los miembros de este grupo a través de tres frentes -musical, doctrinal y física- también ha quedado acreditada en la vista, según la fiscal, que ha destacado la actuación de los principales acusados en la organización de conciertos como el de Talamanca del Jarama (Madrid) en febrero de 2005, en el que miembros de la Guardia Civil requisaron armas y escucharon gritos xenófobos como "seis millones de judíos más a las cámaras de gas".

Además, ha recordado que las letras de las canciones de los grupos que allí actuaron incluían frases como "mis vecinos son asquerosos turcos". En cuanto a la posesión ilícita de armas, la fiscal ha basado su conclusión de que los acusados eran conscientes de que se vendían y con ello se financiaba el grupo porque la jurisdicción del Tribunal Supremo habla de la "tenencia compartida" y, en este caso, todos son culpables de la tenencia porque las armas estaban a su libre disposición.

La fiscal se ha remitido a la declaración de este miércoles de algunos peritos expertos en armas, los cuales han afirmado que tanto las pistolas como las armas extensibles o los sprays intervenidos estaban en perfecto funcionamiento. El Ministerio Fiscal ha mantenido sus peticiones de cinco años para los acusados Roberto L.U., Alberto L.U., Alberto C.M., Ángel U.M., todos ellos de Madrid; para Francisco José L.P., de Jaén; Luis G.R., de Sevilla; Sergio R.D, de Zaragoza, y Jorge G.M, de Burgos.

Cuatro años para Tomás B.L., Sergio F.P., Gustavo A.G., Daniel B.G., David A.R., José A.B. y Jorge V.C., todos ellos de Madrid; y para Ignacio M.B., y Fracisco B.P., ambos de Zaragoza. Y ha seguido pidiendo dos años de cárcel para Óscar F.N.