El delegado territorial de la Junta en Zamora, Alberto Castro, y la alcaldesa de la capital, Rosa Valdeón, fueron los encargados de hacer la entrega de la figura restaurada, unos trabajos que se enmarcan dentro del proyecto 'Zamora Románica', iniciativa que pretende la conservación del patrimonio románico.

"El Gobierno regional apuesta por la remodelación de los templos románicos y de sus bienes inmuebles como una fórmula de aumentar el turismo en la capital y en la provincia", señaló Alberto Castro a los medios de comunicación.

Se trata de la figura de un Cristo Crucificado, una escultura policromada de estilo gótico que se enmarca en la primera mitad del siglo XIV y que no conserva los brazos originales, por lo que los que presenta en la actualidad datan del siglo XVII "de ahí su aparente desproporción", explicaron.

La imagen, tal y como comentaron, se encontraba retirada del culto y presentaba un "preocupante estado de conservación", además de un deterioro muy avanzado en algunas zonas.

Durante los trabajos de restauración eliminaron las sucesivas capas de policromía superpuestas, con el fin de recuperar las más próximas a la cronología de la obra, aunque también se trataron grietas y reintegraron cromáticamente algunas de las pérdidas más notables en el paño de pureza.

Con estos trabajos, además de restaurar "una pieza de notable valor histórico-artísticos", se logró "la puesta en valor y recuperación de parte del patrimonio para el disfrute colectivo", apuntaron desde la Junta de Castilla y León.

Por lo que respecta a la inversión del programa 'Zamora Románica', desde el Gobierno regional informaron que en la provincia de Zamora se aportaron 5,6 millones de euros para la reparación de 22 templos religiosos, aun que a día de hoy ya están finalizados varios de los trabajos.

Por último, recordaron que las intervenciones llevadas a cabo en el proyecto 'Zamora Románica', promovidas por la Consejería de Cultura, en colaboración con el Ayuntamiento de Zamora, el Obispado y la Fundación Rei Afonso Henriques, es finalistas en la categoría Urbanística de los Premios Accesibilidad Universal 2010 de la Fundación DFA.