«Me costó mucho encontrar a gente que quisiera trabajar gratis»

Pilar Palomero es una de las triunfadoras de la décima edición del Festival de Cine Jóvenes Realizadores Ciudad de Zaragoza.
Su película Sonrisas se llevó el premio al mejor corto en vídeo (ex aequo con el de Fernando Vera), mejor guión y mejor edición.

¿Cuál es el argumento?

Es la historia de dos vecinos con vidas solitarias hasta que una grieta en la pared que separa sus salones les hace conocerse. Son un inmigrante de Europa del Este y una madre divorciada con dos hijas.

¿Le costó mucho sacar adelante este proyecto?

Sí. Es necesario muchísimo esfuerzo y dinero. Yo ya tenía algo de experiencia como técnico, pero este corto era muy complicado porque tuvimos que montar los decorados y crear los ambientes. Además, me costó mucho conseguir gente que trabajara gratis y tantas horas.

¿Recibió alguna subvención? 

Sí, tuve suerte, pero creo que el Gobierno de Aragón debería promocionar más el cine de la comunidad como se hace, por ejemplo, en Euskadi, donde las subvenciones son más cuantiosas, lo que permite realizar proyectos mejores y presentarlos en festivales importantes.

¿Hay que irse de Aragón para poder hacer cine?

No, hay escuelas audiovisuales muy buenas, aunque le falta una escuela de cine, pero yo creo que pronto será una realidad.

¿El cine es un mundo muy masculino?

Sí, y la fotografía de cine, que es en lo que me estoy especializando más. Pero cada vez hay más mujeres y nos estamos abriendo un hueco muy importante.

BIO

Pilar Palomero (en la foto, con una de las protagonistas de su corto) tiene 25 años y estudia en Cine de Madrid.

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