Carrera de obstáculos para viajar en tren al aeropuerto del Prat

Protestas por el tiempo de espera. Los andenes son estrechos y no hay ascensores ni escaleras mecánicas para las maletas.
Una viajera intenta cargar, ayer, su maleta por las escaleras de la estación de tren de El Prat.
Una viajera intenta cargar, ayer, su maleta por las escaleras de la estación de tren de El Prat.
Jordi Soteras
Una viajera intenta cargar, ayer, su maleta por las escaleras de la estación de tren de El Prat.
Acceder al aeropuerto en tren se ha convertido en una dura carrera de obstáculos desde que el pasado 4 de diciembre se suprimiera el tren que unía Barcelona con el aeropuerto.
Los pasajeros se ven obligados a cambiar de convoy en la estación del Prat y allí coger un tren lanzadera que les acerque al aeropuerto. La operación es a la inversa si se va del aeropuerto hacia la capital catalana.

A pesar de incrementar el servicio de vigilancia e información en la estación, cuya megafonía avisa de la llegada de los trenes en catalán, castellano e inglés, y de que en el suelo hay pintadas líneas de color para que nadie se extravíe, la estación pratense no está preparada para acoger a tanta gente. Los andenes son estrechos y no disponen de escaleras mecánicas ni ascensores en los que los pasajeros lleven sus equipajes.

«Arrastrar las maletas es lo peor», afirma Mari Carmen Montesinos. «Pierdo media hora», se queja Claudi Santoro, mientras que Débora Bondatti, con miedo a perder el avión, asegura que «tener que cambiar de tren es fatal».

El alcalde del Prat, Lluís Tejedor, reclama que haya un bus que una Barcelona con el aeropuerto con frecuencias de paso inferiores a media hora. Tejedor cree que la ATM, Adif y Renfe «están obligadas moral y políticamente a reforzar este servicio».

Mostrar comentarios

Códigos Descuento