El Bloc abandona el pacto de gobernabilidad en Burjassot por "discrepancias" con la política del PSPV

El Bloc Nacionalista Valencià ha decidido abandonar el pacto de gobernabilidad que firmó a principios de legislatura con el PSPV en el municipio de Burjassot (Valencia) debido a las "discrepancias" surgidas entre ambas formaciones en políticas como la educativa o de comercio y por "la paralización de varios proyectos que habían sido pactados y que no se están llevando a término".

Los representantes del Bloc en la comisión de seguimiento del pacto de gobernabilidad comunicaron ayer a los responsables socialistas la decisión de dejar el pacto, según informaron hoy fuentes de la formación en un comunicado.

El portavoz del Bloc en Burjassot, Jordi Sebastià, explicó que su formación está "decepcionada por la paralización de proyectos" y aseguró no compartir "en absoluto" la actuación del equipo de gobierno en materia educativa o de comercio.

En concreto, censuró "la decisión de privatizar la gestión de la 'escoleta' municipal, que se ha creado gracias a nuestra presión, en la calle Isabel la Católica". "Desde el primer momento el proyecto del Bloc era hacer una 'escoleta' pública, de gestión directa y en valenciano, pero el equipo de gobierno ha dilatado mucho su puesta en marcha y ha decidido privatizar la gestión", explicó Sebastià.

El acuerdo de estabilidad también preveía la construcción de otra 'escoleta', "ahora paralizada, y la restauración del teatro El Progrés y del mercado, obras que se han tenido que aplazar debido a la crisis económica", aseveró el responsable del Bloc. No obstante, señaló que no encuentra "razones" para no empezar la del mercado y "romper así la inquietud que tienen muchos comerciantes de la zona", ya que esta actuación "ya estaba en marcha, los comerciantes ya se han trasladado y en los presupuestos aprobados había una partida destinada a iniciar las obras".

Otro de los motivos que ha llevado al Bloc a romper el acuerdo de gobernabilidad es "la paralización de la Oficina de Promoción del Valenciano", que no tiene "ni un espacio donde ubicarse, ni siquiera un cartel que indique su existencia a los ciudadanos, ni ha podido hacer ninguna campaña de presentación pública", así como "la decisión de no firmar" un acuerdo con los libreros del municipio para que las ayudas municipales a las compras de libros de texto sólo fuera válida en estos establecimientos.

"Este último punto significará un golpe muy duro para las librerías, que son espacios de comercio y de cultura, y no implicará un mejor precio para los padres", señaló Sebastià, quien añadió que el equipo de gobierno "ha demostrado falta de reacción y de sensibilidad al respecto". "DESESTABILIZACIÓN"

El Bloc de Burjassot precisó que la ruptura del pacto "no implica desestabilización en el Ayuntamiento". Su portavoz defendió que en "momentos de crisis es necesario poner por encima de todo la responsabilidad" e insistió en que la voluntad de la formación no es crear "desestabilización sino colaborar a llevar adelante políticas progresistas".

En este sentido, se manifestó "moderamente satisfecho de haber conseguido cuestiones importantes de su programa gracias al pacto, como la puesta en marcha del nuevo PGOU o la aprobación del reglamento de participación ciudadana, pero consideramos que desde la pura oposición podremos presionar todavía más para que los proyectos no se estanquen y vayan adelante", argumentó Jordi Sebastià.

Finalmente, el Bloc manifestó su "discrepancia" con la gestión en materias como "la polémica por la construcción del nuevo colegio Sant Joan de Ribera, o el traslado del mecadillo provisional, con falta de diálogo con los grupos implicados y una buena dosis de improvisación, un estilo que no podemos compartir".

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