El Consello de Contas detectó en su informe referido a 2007 que las diputaciones provinciales de Pontevedra y de Ourense presentan déficit en sus cuentas, ya que el resultado de su presupuesto no financiero —derechos reconocidos netos menos las obligaciones reconocidas netas—, por lo que les recuerda la obligación de la ley de régimen fiscal de aprobar un plan de saneamiento financiero "en un plazo no superior a tres años".

Según recoge el informe de Contas, entregado hoy en la Cámara autonómica, la liquidación presupuestaria "es conveniente que sea positiva", es decir, que no exista déficit, puesto que si es negativa "se produciría una situación de dependencia del balance de activos y pasivos financieros para equilibrar el presupuesto".

Así las cosas, el órgano fiscalizador recoge que la Diputación de Ourense tiene 75.512.189 euros en concepto de derechos reconocidos (ingresos), mientras que tiene que hacer frente al pago de 80.941.925 euros en concepto de obligaciones, con lo que su saldo no financiero es negativo (-7,19 por ciento). Por su parte, la Diputación de Pontevedra tiene derechos por valor de 153.264.991 euros y pagos por 169.762.979 euros (-10,76%).

Con superávit se encuentran las diputaciones de A Coruña y Lugo, que contabilizaron un saldo positivo (tras restar a los derechos las obligaciones) de 14.565.905 y 27.531.455 euros (+7,81% y +25,72%), respectivamente.

Sin embargo, las cuatro diputaciones provinciales disponen de un "amplio margen" de endeudamiento a corto plazo, debido a que se encuentran todas dentro de los límites regulados por la ley para este tipo de operaciones. De acuerdo con la normativa vigente, las entidades locales pueden concertar operaciones de crédito a corto plazo para atender las necesidades transitorias de tesorería, siempre que no superen en su conjunto el 30 por ciento de sus ingresos liquidados por operaciones corrientes en el ejercicio anterior.

En 2007, además, se redujo el peso de la deuda total de las diputaciones sobre sus respectivos ingresos corrientes, a excepción de en la de Pontevedra, que lo incrementó en un 3,23 por ciento. Así, la diputación pontevedresa pasó de una deuda viva a largo plazo del 74,45 por ciento (48,31 millones de euros) en 2006 a 70,11 por ciento en 2007 (49 millones de euros).

Por su parte, el peso de este tipo de deuda en la diputación coruñesa pasó del 52,3 por ciento al 48,13 por ciento; mientras que en Ourense se redujo del 74,45 por ciento al 70,11 por ciento. En cuanto a Lugo, pasó del 17,16 al 9,18 por ciento.

Combatir la morosidad

Por otro lado, el órgano fiscalizador urge a las entidades locales la adopción de medidas eficaces para tratar de solucionar la "grave morosidad" en el pago de obligaciones pendientes, después de haber detectado que, en 2007, 50 ayuntamientos gallegos liquidaron el ejercicio con remanentes de tesorería para gastos generales y ahorro neto negativos.

En este sentido, Contas enfatiza que es "necesario vigilar" especialmente su gestión presupuestaria y financiera, porque su solvencia "está comprometida". Por un lado, lo está la solvencia financiera a corto plazo, porque se registran remanentes de tesorería negativos y, por otro, la solvencia financiera a largo plazo, por registrarse un ahorro neto también negativo.

No obstante, con cautelas y salvedades, podría decirse que los periodos de cobro en los que incurren las entidades locales de Galicia generalmente son más cortos que los de pago, por lo que la relación es favorable para las entidades, según constata el Consello de Contas.

Según los datos del informe, sólo Vigo y Ourense presentan indicadores inferiores a 60 días en el pago de las obligaciones de los ayuntamientos, frente a localidades como Ferrol (121,31 días), Santiago de Compostela (105,10 días), Pontevedra (92,73 días) y Lugo (74,76 días). También destaca que el periodo medio del pago de la Diputación de Ourense es de 74,32 días.

Ayuntamientos pequeños

Los periodos medios de pago de los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes presentan valores "significativamente más elevados", con lo que alcanzan medias de 104,10, 96,03 y 100,65 días de media.

Del total de ayuntamientos, 204 tardan más de 60 días, 148 lo hacen en más de 148 días, 88 hacen frente a sus pagos en más de 120 días, otros 27 registran una media de más de 180 días y 19 contabilizan una morosidad media de más de 200 días. Para el Consello de Contas, estos datos "ponen de manifiesto una situación en la que es urgente la adopción de medidas eficaces".

Por otro lado, las conclusiones de Contas apuntan que la diputación que más gasta por habitante es la de Ourense, con 245,86 euros por ciudadano del gasto público total y 165,6 euros por habitante del gasto corriente. También registra el gasto corriente sobre su gasto total más elevado de todos los entes provinciales, un 71,42 por ciento.

Por su parte, la ciudad que más gasta por habitante es la de Santiago, con 1.057 euros en relación al gasto público total y 757,83 euros en referencia al gasto corriente. El peso del gasto corriente sobre el gasto total es mayor en Ourense, con un 84,35 por ciento.