Sindicatos y empresarios califican de positivo el descenso aunque dicen que no es la fase de recuperación

CCOO, UGT y la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM) calificaron hoy de positivo el descenso registrado en los datos del paro durante mayo en Málaga con respecto al mes de abril --2.463 desempleados menos--. No obstante, apuntaron que la provincia no está en fase de recuperación y señalaron que se precisa un tiempo de cálculo mayor para avanzar conclusiones más favorables.

En este sentido, recordaron que, en términos absolutos, se trata de la mayor bajada del paro registrada en mayo en los últimos siete años en la provincia. Por su parte, desde la CEM precisaron que el descenso intermensual iniciado en marzo y que continúa en mayo puede explicarse por el inicio de la temporada turística.

Tanto los sindicatos como la patronal subrayaron que el mayor descenso se ha registrado en el sector servicio, donde ha bajado en 2.047 personas, lo que supone una reducción del 2,1 por ciento. En construcción, ha bajado en 947 personas —2,2 por ciento— y en el sector industrial el descenso registrado ha sido de 190 desempleados —1,6 por ciento—. Por el contrario, el paro en el sector agrícola y pesquero sí ha aumentado, con 22 desempleados más que hace un mes —0,8 por ciento—.

Del mismo modo, hicieron referencia al comportamiento del paro en hombres y mujeres, incidiendo en que se ha registrado un descenso más intenso en los varones, donde ha bajado un dos por ciento —1.832 desempleados menos—, mientras que en las mujeres ha bajado en un 0,7 por ciento —628 trabajadoras menos en las listas del paro—.

Desde UGT defendieron un modelo de relaciones laborales en el que "la negociación colectiva, la justicia y la equidad sean primordiales", pues, según añadieron, "la inversión pública, la defensa de los servicios públicos y del gasto público social garantizan una sociedad donde no sean quienes se encuentran en posiciones más vulnerables los más perjudicados".

Por su parte, los empresarios insistieron en la necesidad de articular medidas que fomenten la productividad y la regeneración del empleo, así como la importancia "vital" de poner en marcha iniciativas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas (pymes), tanto fiscales como de apoyo a la innovación y a la formación de los profesionales.

"Reducir las cargas burocráticas y fiscales que soportan las pymes, terminar con la morosidad de las administraciones públicas, fomentar el consenso y el diálogo social y crear un ambiente adecuado para la promoción del tejido empresarial malagueño, son objetivos clave para superar momentos de crisis como el que actualmente afecta a nuestra economía", apostillaron.

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