Según explicó ayer el presidente del Consorcio, Alfonso Ramos, este organismo ha apostado por iniciar su actividad rehabilitadora en el área más abandonada, la de la Ferrería, que se extiende por  calles como Abeleira Menéndez y San Sebastián, por debajo de la casa consistorial. Una zona actualmente desaseada y carente de servicios, si descontamos los prostíbulos.

Hasta 2009, se invertirán 30 millones para recuperar cerca de 600 viviendas del Casco Vello. En este barrio hay  2.134 inmuebles, de los cuales 533 están en «muy mal estado», reconoció Ramos.

Ayudas económicas

Concello y Xunta ofrecen subvenciones a los promotores o propietarios que rehabiliten edificios o pisos en el Casco Vello de hasta el 75% del importe de las obras.

Requisitos: Que el inmueble se ocupe una vez terminada la obra. Se prioriza la recuperación de áreas como la Ferrería frente a la zona que rodea la Porta do Sol, y las ayudas son mayores para las personas con menos recursos.

Más información: En la Oficina Municipal de la Vivienda (Praza da Princesa, 7) y en el número 986 442 560.

Pontevedra, un ejemplo a seguir

El plan de recuperación del área histórica de Pontevedra, iniciado hace seis años con la ubicación estratégica de edificios institucionales, ha desembocado en la rehabilitación de 700 viviendas. El casco vello pontevedrés, que abarca el 30% de la ciudad frente al 5% en el caso vigués, pasó de ser una zona marginal invadida por los coches a convertirse en un área peatonal cuidada y activa con comercios y locales de ocio. Buena prueba de ello es que a día de hoy resulta difícil adquirir una vivienda en este barrio.

El precio del m2 nuevo se ha doblado desde 1999

La oferta es casi inexistente. La fuerte escalada del precio de la vivienda en los últimos años volvió los ojos de muchos inversores hacia el Casco Vello, una zona abandonada pero céntrica,  donde en 1999 se podía comprar un piso usado de 50 m2 por cerca de 36.060 euros (750 euros/m2).

Hoy el precio de los inmuebles, ya sean de segunda mano o rehabilitados, es el doble. El precio medio de la vivienda usada se mueve entre 1.200 y 1.800 euros/m2, mientras que en el caso de las rehabilitadas, pueden alcanzar precios de 3.600 euros/m2. El mismo que en zonas el Calvario o en Sanjurjo Badía. Y aunque ya no suben, tampoco bajan por la escasez de oferta.

«Hay sospechas de que la zona se revalorizará mucho en 10 años con la actuación del Consorcio, así que ahora salen pocos pisos a la venta, a la espera de sacarles luego más partido», afirman desde la inmobiliaria Eurovivienda. X. G.