Font de Mora realizó durante la comparecencia en rueda de prensa, junto con la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo; tras la reunión constitutiva del Consorcio Espacial Valenciano, que fue presidida por el presidente de la Generalitat y en la que también participó la vicerrectora de investigación de la Universitat Politécnica de València, Amparo Chiralt. El presupuesto inicial del consorcio es de 1.280.000 euros.

De esta manera, el titular de Educación explicó que a partir del 28 de junio, una vez se inaugure el laboratorio de investigación de la ESA en Valencia, se convocará a empresarios para que los miembros técnicos del Consorcio les indiquen hacia qué campos deberían orientar su actividad industrial", sobre todo en sectores que tienen una participación importante en este tipo de procesos como el sector del metal, el de los componentes electrónicos o de la cerámica, "para que puedan contribuir a fabricar componentes que puedan ser utilizados luego en satélites".

El conseller señaló que la instalación de este laboratorio de la ESA en la Comunitat "abre una serie de perspectivas que, en un momento como este de crisis, da oportunidades para que a través de esta actividad se puedan generar nuevos puestos de trabajo".

"Esta propuesta es una primera aproximación a los representantes empresariales de la Comunitat y con esto creemos que se puede ya comenzar a andar en una senda que nos puede llevar a ser una ciudad vinculada plenamente al desarrollo de la actividad aeroespacial europea", declaró.

En la misma línea, la alcaldesa de Valencia aseguró que este proyecto va a situar la ciudad en el centro de la alta tecnología europea y va a "atraer" elementos de la industria aeroespacial y "repercutirá" en empresas de logística, aseguró. Además, afirmó que la ciudad se convertirá en "foco de atracción" de científicos.

La alcaldesa, asimismo, declaró que la repercusión de este proyecto se verá también en el ámbito turístico gracias a la celebración de congresos en la ciudad. El rector de la UV, Esteban Morcillo, por su parte, aseguró que este centro será "factor de internacionalización" de las universidades valencianas.

La creación de este Consorcio Espacial Valenciano surge del acuerdo suscrito el pasado mes de marzo para instalar en la ciudad de Valencia el Laboratorio de Radiofrecuencia de Alta Potencia de la Agencia Espacial Europea (ESA). APORTACIONES

Por otra parte, el conseller explicó que en la reunión se han aprobado las cuantías necesarias para el funcionamiento del Consorcio. En concreto, la Generalitat aportará 1.730.000 euros durante el periodo 2010-2013, mientras que el Ayuntamiento de Valencia se compromete a tener en previsión un terreno para poder en su día desarrollar un centro específico cuando el proyecto siga funcionando.

Por su parte, la UPV pone a disposición del Consorcio un local y el equipamiento científico-técnico con un valor calculado en 1,5 millones de euros. Asimismo, la UV pone también a disposición un local y además el equipamiento científico-técnico correspondiente por un valor de 735.000 euros.

En la reunión también se han aprobado los presupuestos de la programación general para lo que queda de año, por un importe de 1.280.000 euros. Además, con el fin de fomentar la formación de los ingenieros en el ámbito de las comunicaciones por satélite, especialmente en el ámbito de los sistemas de alta potencia de radiofrecuencia espacial, se ha decidido convocar tres becas para ingenieros en prácticas de nueve meses de duración.

La instalación del Laboratorio de Radiofrecuencia de Alta Potencia de la Agencia Espacial Europea (ESA) supondrá una inversión de más de 15 millones de euros durante cinco años.

El laboratorio, que se ubicará en las instalaciones de la Ciudad Politécnica de la Innovación y de la UV, estará plenamente operativo el próximo mes de julio y contará inicialmente con 46 personas, de los que 29 son investigadores y 15 técnicos de apoyo.

El objetivo final del laboratorio de a ESA será garantizar el "fallo 0" en los componentes de los satélites frente a efectos de alta potencia. En definitiva, se trata de comprobar que los componentes del satélites son aptos para que, una vez en el espacio, éste pueda funcionar correctamente.