Según explicó Fernández a Europa Press, el temporal que azotó la toda Andalucía desde diciembre y que dejó una media de 800 litros por metro cuadrado, ha sido el "mejor exámen que podía pasar una infraestructura de nueva creación" como es este embalse, situado en el Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla y con una capacidad de 180 hectómetros cúbicos.

De este modo, afirmó que los informes finales elaborados por los técnicos han constatado que, tanto durante la fase de llenado, "inusualmente acelerada por las condiciones naturales", como en los desembalses, la infraestructura es "válida" y tiene un comportamiento "totalmente correcto", sin que los técnicos, que han realizado "mediciones constantes hayan detectado ni movimientos en la estructura ni fisuras".

En este sentido, dijo que los desembalses, que se iniciaron a partir del 19 de febrero y se sucedieron durantes varias jornadas seguidas, "se hicieron conforme a los protocolos de seguridad establecidos, tanto para la integridad de la presa como para el interés de los ciudadanos", a pesar de los "bulos que se corrieron por desconocimiento".

"No es cierto que se aliviara agua del pantano antes de lo previsto. Los Melonares es una infraestructura muy importante, con una inversión de más de 110 millones de euros y que puede causar muchos problemas si no se ajusta su funcionamiento al milímetro a los protocolos de seguridad", defendió.

Recordó que la Administración ha hecho un "esfuerzo muy grande" en la aplicación de medidas compensatorias de carácter ambiental para garantizar que no se produzca ningún impacto en el entorno, un espacio natural protegido incluido en la Red Ecológica Europea Natura 2000 que, además, incluye habitats de interés prioritario.

De hecho, el Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla, que ocupa 177.484 hectáreas situadas en los últimos macizos occidentales de Sierra Morena, alberga 14 tipos de habitats de interés prioritario, con poblaciones de especies amenazadas como el águila imperial ibérica, la cigüeña negra, o el lince ibérico, además de nutria, águila real, milano negro, águila culebrera, aguilucho cenizo, o búho real, entre otras especies de interés especial.

Estas medidas compensatorias van desde la creación de un Área de Compensación Ecológica de unas 1.600 hectáreas, que permitirá ejercer una fución similar a la zona que se ha visto afectada por la creación del embalse, a la construcción de dos azudes en las colas del embalse para aumentar la superficie de lámina de agua permanente o el diseño de un Plan de Seguimiento y Control de las actuaciones.

Adjudicación de las obras

Asimismo, indicó que próximamente se adjudicarán las obras para conducir el agua de Los Melonares desde la conexión existente en el Canal del Viar hasta el sistema de abastecimiento de Sevilla, actuación que cuentan con un presupuesto de licitación de 27 millones de euros.

Recordó que, con un plazo de ejecución de 30 meses, los municipios de la provincia de Sevilla podrán abastecerse de los recursos almacenados en Los Melonares a partir de 2013. En estos momentos, la presa se encuentra al 89,44 por ciento de su capacidad, con 166 hectómetros cúbicos.

Las obras consisten en la adecuación y renovación de la infraestructura hidráulica existente en el Canal del Viar, donde se proyectan nuevas instalaciones. Concretamente, se construirá un nuevo depósito de cabecera en el Canal del Viar de 12.000 metros cúbicos de capacidad y una nueva conducción que unirá la tubería existente entre San Ignacio del Viar y la Estación del Bombeo del Viar, a través de 13,7 kilómetros de longitud.

Asimismo, también se incluyen obras de protección y regulación del canal existente en sus primeros 30 kilómetros, para diferenciar los usos de abastecimiento (agua procedente de Melonares) con los de riego (agua procedente del embalse de El Pintado).