Los detenidos, todos ellos de una misma familia son José Carlos P.B., de 46 años de edad y sin antecedentes; Rosa C.C., de 42 años y sin antecedentes; Yérica P.C., de 20 años de edad y sin antecedentes; José Antonio P.M., de 22 años y con antecedentes policiales, y Norberto José P.C., también de 22 años y con antecedentes policiales.

Según informó en un comunicado, La Policía Nacional conocía la existencia de un posible punto de venta de estupefacientes, lugar de reunión de jóvenes de la localidad, por lo que estableció un dispositivo para localizar e identificar a los posibles vendedores de droga.

Observaron a Norberto José P.C. cerca del citado punto, al cual se le aproximaban diversos jóvenes e intercambiaban pequeños envoltorios a cambio de dinero. Además vieron cómo, tras entablar una pequeña conversación con cuatro o cinco jóvenes, abandonaba el lugar bien en bicicleta o en ciclomotor hasta un domicilio de la localidad, regresaba en escasos minutos y realizaba las transacciones con los mismos. Los investigadores se centraron en el inmueble al que se dirigía Norberto José, pudiendo comprobar que se trataba de su domicilio, donde habitaba en compañía de los demás detenidos.

El clan familiar supuestamente tenía distribuidas las funciones. Norberto José P.C. y José Antonio P.M. eran los encargados de la distribución de la droga. El primero lo hacía a diario y en el mismo punto donde contactaba con los clientes de forma directa; el segundo realizaba la venta de la droga en cualquier punto de la barriada donde previamente había quedado citado con el cliente de forma telefónica, sistema conocido como 'Telepolen'.

Yérica P.C., apoyaba a ambos en sus actividades, colaborando de forma directa en la venta de la droga, ocultándola en su ropa interior para obstaculizar una posible intervención policial, así como, acompañando a José Antonio P.M. en sus desplazamientos a los distintos puntos de venta. José Carlos P. B y Rosa C. C eran los encargados de custodiar la droga en el domicilio.

Tras el dispositivo policial efectuado consistente en continuas vigilancias y seguimientos, evidencian que tanto Norberto José como José Antonio realizan una media de 30 a 40 "pases de droga" diarias y que su modus operandi se basa en realizar venta de estupefaciente en pequeñas cantidades pero de forma continuada y diaria.

Constatada la actividad delictiva, los agentes tras solicitar a la Autoridad Judicial la correspondiente autorización de entrada y registro, procedieron el día 21 de este mes a realizar el registro del domicilio familiar, donde se procedió a la detención de los cinco implicados.

En el registro domiciliario, los agentes se incautaron unos 200 gramos de hachís, 9.000 euros en billetes fraccionados, diverso material audiovisual, teléfonos móviles, armas blancas, un arma de fuego simulada, dos ciclomotores, un vehículo tipo deportivo valorado en más de 30.000 euros, joyas de considerable valor entre las que se encuentra un Reloj de oro macizo y material diverso destinado al corte de la sustancia estupefaciente.

Tras la finalización de las gestiones policiales, José Antonio P.M. y Norberto José P.C., pasaron a disposición de la Autoridad Judicial competente, quien decretó el ingreso en prisión del primero. A los cinco detenidos se les imputa un Delito contra la Salud Pública.

Con esta actuación policial se ha desmantelado un importante punto de venta de estupefaciente en la localidad de Dos Hermanas que estaba creando gran malestar en la vecindad, según añadió la Policía.