El director general de Salud pública defiende la necesidad de vacunarse ante la gripe porque reduce la mortalidad

El director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Javier Falo, defendió hoy ante la Comisión de Sanidad de las Cortes autonómicas la necesidad de vacunarse ante la gripe si se es un grupo de riesgo porque contribuye a reducir la morbilidad y la mortalidad y explicó que ya están preparando la campaña de cara al próximo otoño, para lo que tendrán en cuenta cómo evoluciona esta patología en el hemisferio sur.

El director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Javier Falo, defendió hoy ante la Comisión de Sanidad de las Cortes autonómicas la necesidad de vacunarse ante la gripe si se es un grupo de riesgo porque contribuye a reducir la morbilidad y la mortalidad y explicó que ya están preparando la campaña de cara al próximo otoño, para lo que tendrán en cuenta cómo evoluciona esta patología en el hemisferio sur.

Falo compareció hoy a propuesta de la consejera de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón, Luisa Noeno, para informar de los resultados de las medidas aplicadas a raíz de la alerta pandémica que hizo la Organización Mundial de la Salud ante la aparición y propagación de un nuevo virus de la gripe A.

El director general reconoció que la vacunación frente a la gripe A, de la que se suministraron 55.178 dosis, tuvo una cobertura baja, del 24 por ciento en personas con patología anterior, del 6,5 en el caso de las embarazadas y del cuatro por ciento en los profesionalidad de salud, frente al casi el 31 por ciento de estos profesionales en el caso de la vacuna de gripe estacional, que se adelantó dos semanas sobre las fechas habituales para no coincidir ambas.

Además, continuó, el 60 por ciento de las personas mayores de 65 años se vacunaron de la gripe estacional, con una "cobertura similar" a años anteriores, salvo en el caso del personal sanitario, que fue más elevada, ya que habitualmente sólo no llega al diez por ciento, a pesar de que se les recomienda, línea en la que "tenemos que seguir trabajando".

El director general defendió la seguridad de la nueva vacuna de la gripe A, porque se elaboró en el mismo tiempo que se realizan las demás, cinco meses, y se realizaron las mismas fases. En este caso, además, hubo un seguimiento especial de todos los efectos adversos y "produjo menos que la epidémica".

En su opinión, "probablemente que las autoridades sanitarios no supimos trasladar con la suficiente contundencia algunas ideas", frente a mensajes en contra de esa vacuna, una herramienta "básica" para la salud pública, junto con las prácticas higiénicas básicas en el caso de la prevención de la gripe, además de que se dispuso de ella "cuando el pico ya se había producido".

Respecto a los antirretrovirales, explicó que "se indicaron muy pocos tratamientos", cumpliendo "las condiciones restrictivas que desde Departamento se habían dispuesto", vendiendo 324 envases en las farmacias "para graves y susceptibles de complicaciones".13 FALLECIDOS

El director general informó de que en Aragón fallecieron 13 personas en la pasada epidemia de gripe, una tasa de un 0,027 por ciento, "diez veces inferior a una gripe estacional" habitual, con un pico de incidencia "ni especialmente alto ni largo", que alcanzó los 744 casos por 100.000 habitantes, concentrándose el mayor número de casos entre la última semana de octubre y la primera de noviembre.

Falo indicó que los servicios de Pediatría y las urgencias registraron en ese periodo mayor sobre carga de trabajo, si bien en estos últimos disminuyeron alrededor de un cinco por ciento en diciembre de 2009 y en el primer trimestre de 2010 respecto al mismo periodo del año anterior. Por eso, comentó, los "costes en los dispositivos asistenciales no fueron superiores a los de otra temporada de gripe".

Asimismo, señaló que la tasa en Aragón fue el doble de la media nacional, hecho para que indicó que no tenía una explicación, con una "inusual" circulación del virus de la gripe en verano en la provincia de Huesca y una incidencia más alta durante el otoño en Teruel, con un retraso en su aparición de dos semanas, así como en la zona urbana de Zaragoza, en este caso en lugares con mayor concentración de población infantil.

En este sentido, apuntó que los menores de hasta 14 años han sido el grupo de edad más afectado, lo que produjo un "absentismo escolar" en educación Primaria y primeros cursos de Secundaria, en las semanas de mayor incidencia.

Por otra parte, explicó que se realizó un triaje sanitario a través del teléfono Salud Informa, que recibió desde el 1 de noviembre y hasta el 23 de diciembre 3.627, casi todas de la zona urbana de Zaragoza, y a quienes en un 71 por ciento de los casos se les recomendó reposo domiciliario y autocuidados.

Francisco Javier Falo indicó que más del 90 por ciento de los usuarios de este teléfono lo valoraron con calificación buena o muy buena y por eso del Departamento no descarta volver a utilizar en la próxima temporada de gripe "u otras circunstancias".

El director general estimó que a partir de los meses de julio y agosto de 2009 "intentamos transmitir un mensaje cauto de lo que podía ser en el futuro", si bien como aprendizaje para la próxima campaña indicó que se podía "mejorar algunos aspectos relacionados con la comunicación" para "contrarrestar algunas voces" y aconsejó que, ante esta enfermedad, "no se crean a nadie que diga lo que va a pasar porque no se sabe".

Apoyo del pp

El diputado del Partido Popular (PP), Ricardo Canals, recordó que su partido se mostró "dispuesto a colaborar" desde el principio, y estimó que la actuación del Gobierno fue "la única posible" ante la actuación que se impulsó desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) y desde el Gobierno de España.

No obstante, "algo falló" porque finalmente la situación de alarma creada no se correspondió con lo ocurrido, lo que "provoca falta de credibilidad en el sistema" y preguntó al director general "qué lecciones hemos aprendido" y "si esto vuelve a producirse, qué filtros podemos tener".

Los portavoces de los otros dos grupos de la oposición, Chunta Aragonesista (CHA) e Izquierda Unida (IU) fueron más críticos. La diputada de CHA, Nieves Ibeas, criticó que hubiera un elevado número de vacunas compradas que no se han utilizado porque la población no se quiso vacunar y "la mayor parte de los profesionales sanitarios decidieron que no se la ponía" lo que supone un "gran coste económico y un tremendo negocio para las empresas farmacéuticas" y calificó lo ocurrido como "un ejemplo claro de hipocresía social".

Por eso pidió una "reflexión" porque "hemos matado moscas a cañonazos" y "alguien tiene que asumirlo". En la misma línea, el diputado de IU, Adolfo Barrena, se preguntó por qué las Administraciones sanitaria "no salieron a tranquilizar" a la población ante una situación de "alarma" sobre una gripe que ha tenido una tasa de mortalidad "diez veces menor" que la estacional habitual.

"La población no entró al juego y por eso se negó a vacunarse", pero "hay unas responsabilidades que hay que asumir" de "cómo y por qué se produjeron estas cosas".

El diputado del Partido Socialista, Eduardo Alonso, uno de los grupos que apoya al gobierno, resaltó la "transparencia e información", la colaboración de todos los Departamentos del Gobierno de Aragón y la "madurez "de los usuarios "que nunca produjeron ningún desbarajuste" en el sistema sanitario, así como el "tono responsable de todos los grupos, especialmente del PP, como partido principal de la oposición".

El diputado del Partido Aragonés, Javier Callau, el otro grupo que apoya al Gobierno, opinó que la respuesta "ha sido exagerada", si bien el Ejecutivo aragonés "no podía hacer otra cosa" ya que se trata de una política sanitaria "europea y nacional" y "Aragón no podía actuar al margen" puesto que "la población no habría entendido otra cosa".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento