El acuerdo pretende, según Espinosa, reforzar el compromiso de colaboración con la UICN y que a las actividades que las administraciones públicas lleven a cabo en las instalaciones malagueñas se pueda sumar la iniciativa del sector privado y de administraciones locales.

Tras el acto de la firma, Espinosa destacó que el convenio posibilita a la UICN, desde su centro de Málaga, encajar sus objetivos —como la defensa de la biodiversidad, la conservación del patrimonio natural, la lucha contra especies invasoras, la defensa de las que están en peligro de extinción o la pesca sostenible— "a la puerta del Mediterráneo". "Es un paso más en la defensa de la biodiversidad", resumió la ministra en alusión a la celebración en 2010 del Año Internacional de la Biodiversidad.

Por su parte el consejero andaluz saludó que el "compromiso renovado" con el centro permitirá profundizar en el "trabajo concienzudo e importante" que ya desarrollan Junta y Ministerio en una zona que, además de contar con una gran riqueza natural es "un espacio de alerta", advirtió.

Tras destacar que la UICN, a la que definió como una "ONU de la naturaleza" cumplirá en diciembre diez años con un centro en Málaga, Díaz Trillo advirtió de que los retos futuros, "van más allá de la conservación y protección de las especies, hacia el desarrollo sostenible".

El acuerdo fue rubricado asimismo por la directora general de la UICN, Julia Marton-Lefèvre, y la directora de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Elena Madrazo, organismo que se suma por primera vez a la colaboración con la organización conservacionista.

Para la responsable de la UICN, la década de andadura del centro ha permitido convertir a la región en "un punto de atención para resto del mundo". En cualquier caso, Marton-Lefèvre señaló que "no todo es color de rosa" porque "no hemos ganado la batalla". "El Mediterráneo sigue estando bajo presión y hoy más que nunca necesitamos unir nuestros esfuerzos y seguir avanzando mano a mano. Los indicadores siguen siendo alarmantes porque la proporción de animales y platas amenazados sigue siendo espantosa", lamentó.

En virtud del convenio, la UICN desarrollará una 'Estrategia para el Mediterráneo' que aborde principalmente áreas de trabajo como el uso y conservación de la biodiversidad, la lucha contra la pobreza, conservación del patrimonio natural y cultural, especies exóticas invasoras y especies en peligro, pesca y acuicultura sostenibles, agua, tierras áridas, desertificación, gobernanza y tráfico marítimo, gestión de islas, cambio climático o energía.

Como adelantó Espinosa, el acuerdo permitirá reforzar la colaboración entre los miembros mediterráneos del UICN y también ampliar la colaboración técnica horizontal con los países mediterráneos, así como con organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, el sector privado y las comunidades locales en los diferentes aspectos tendentes a lograr el desarrollo así como la conservación y el uso sostenible de los recursos.

Asimismo, el centro apoyará la aplicación del Convenio de Barcelona ( de protección del medio marino y de la región costera del mar Mediterráneo) y el Plan de Acción para el Mediterráneo del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y los otros Convenios y Acuerdos Internacionales de medio ambiente relevantes.