El Ayuntamiento de Boadilla (Madrid) aprobó multar con 392.000 euros a Trapsa, la empresa más antigua de Díaz Ferrán, el jefe de la patronal española. Le va a imponer esta sanción porque ha incumplido un contrato y no ha terminado a tiempo un centro de gimnasia que está construyendo en este municipio.
Como ya publicó 20 minutos el 30 de diciembre de 2009, el Ayuntamiento había perdonado hasta ahora esta multa. Díaz Ferrán no había terminado la instalación en el plazo fijado en el pliego de condiciones, aunque sacó beneficios económicos con ella, ya que hipotecó esta concesión pública para conseguir un préstamo de 11 millones.
La construcción del pabellón de gimnasia, un solar público de 6.242 m2, fue adjudicada por el anterior alcalde, Arturo Panero, imputado en el caso Gürtel. El PSOE también ha pedido que se rescinda esta concesión. "Podríamos así retomar las obras, construyendo un espacio deportivo con gestión municipal y precios asequibles para los vecinos". señala Pablo Nieto.
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