En declaraciones a los medios durante la concentración, el secretario general de la federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Jesús González, aseguró que "este Gobierno ha perdido el rumbo y el crédito", y que la estrategia "equivocada" que está llevando a cabo, "no es compartida por nadie y va a tener la respuesta que se merece, que es la huelga".

En este mismo sentido se pronunció el representante de CSI, Lucas Álvarez, que añadió además que la política de Zapatero se rige por la "improvisación". Fruto de ello, y según explicó Álvarez, el Gobierno "se está ganado enemigos, ahora el único aliado que tiene es la patronal".

Además, dudó de la intención del presidente del Gobierno de aplicar medidas más duras a las rentas altas, y tachó la estrategia de ser un intento por parte del Ejecutivo de ganarse a la opinión pública. Sin embargo, para el representante de CSI, conseguirá todo lo contrario. Así, manifestó que cada vez "se unirá más gente hasta llegar a una huelga que ya es imparable". El primer ejemplo de la unión ciudadana es la concentración celebrada hoy, que según la Policía, reunió a más de 600 personas.

Por su parte, el representante de UGT, Luis Ángel Ardura insistió en que "un funcionario no es una persona con corbata, inaccesible, y sentada en un despacho". Sino que, de hecho, son ellos quienes están haciendo el "esfuerzo económico", justo a los pensionistas, a los que Ardura se refirió como "clases bajas y medias".

Asimismo, defendió que quienes deberían estar afrontando las consecuencias de la crisis son "sus auténticos culpables, los especuladores", y que ante el panorama económico actual, el Gobierno debería centrarse en "la justicia y la proporcionalidad".