El alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, acompañado de la concejala de Familia, Bienestar Social e Igualdad, Isabel Gómez-Barreda, presentó hoy en rueda de prensa el 'Programa Enlace', una novedosa iniciativa que requiere de la colaboración social; un recurso que se dirige a "familias normales que atraviesan momentos dramáticos" como consecuencia de la crisis, indicó.

Al respecto, precisó que se trata de atender a las familias que necesitan una vivienda porque no la tienen, ya no pueden pagarla o ésta no cumple condiciones adecuadas, facilitándoles temporalmente un alojamiento hasta que puedan normalizar su situación. El Ayuntamiento actuará como enlace directo con las asociaciones para el desarrollo del programa, que correrá a cargo de éstas.

En concreto, el programa tiene tres líneas básicas. Por un lado, el Ayuntamiento generará viviendas tuteladas en las próximas promociones que realice de vivienda pública, reservando para las familias en riesgo de exclusión un porcentaje de VPO similar al de las personas con discapacidad, un tres por ciento. Así, en la próxima promoción que realizará, en la Albericia, el tres por ciento de las 152 viviendas se destinarán a este fin.

En segundo lugar, pondrá a disposición de las familias cinco viviendas municipales vacías, a las que a corto o medio plazo se sumarán otras diez, que se irán incorporando al programa a medida que estén disponibles.

De este modo, indicó De la Serna, en una primera fase se daría cobertura a entre 12 y quince familias, y a unas 24-30 en total, además de las VPO.

La tercera línea del 'Programa Enlace' es que las organizaciones, fundaciones, asociaciones, entidades económicas y sociales que tengan viviendas vacías a su disposición, las incorporen de manera gratuita a esta iniciativa.

El alcalde explicó que el Ayuntamiento comenzará "ya" a firmar convenios con las entidades sociales interesadas en gestionar los pisos, con la supervisión del Consistorio.

En el convenio se recoge la cesión temporal de las viviendas municipales a las asociaciones participantes, que se encargarán de equipar los pisos y asumir el coste de los servicios de agua, electricidad, etcétera, así como de tutelar a sus inquilinos, que serán seleccionados por los Servicios Sociales municipales.

La tutela consiste en un plan individualizado de las familias. Se verá quién puede pagar o no la manutención, porque la tutela garantizará que las necesidades básicas estén cubiertas, además de procurar su incorporación a la sociedad, ya que el programa se dirige a familias "normales" pero que, afectadas por la crisis, se encuentran en situación de exclusión social.

El Ayuntamiento supervisará la tutela de las asociaciones a cada familia. Se trata, precisó De la Serna, de aprovechar la estancia en las viviendas para mejorar la formación y empleabilidad de los inquilinos, además de que puedan ahorrar para acceder a una vivienda normalizada.

El alcalde destacó que ya hay una entidad interesada en participar y en poner un vivienda a su disposición, y confió en que este ejemplo sea seguido por otras.

De la Serna indicó que esta iniciativa forma parte de su compromiso de incrementar las políticas sociales municipales con un "salto cualitativo", en este caso, respondiendo a una necesidad trasladada desde los propios colectivos sociales.