La operación se desarrolló ayer, cuando la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Vecindario, en unión de Inspectores de Pesca del Estado, realizaron una inspección en las citadas instalaciones para controlar las capturas de tallas mínimas, según informó hoy la Benemérita en un comunicado.

Como resultado de dicha inspección se procedió a la incautación de aproximadamente 3.000 kilogramos de longorón por infracción a lo establecido en el anexo XII (no reunir la talla mínima) del Reglamento del Consejo de 30 de marzo de 1998 para la Conservación de los Recursos Pesqueros, a través de Medidas Técnicas de Protección de los Juveniles de organismos marinos.

Para centros benéficos

El pescado intervenido procedía de tres barcos distintos, según la investigación de la Guardia Civil, que ha instruido las correspondientes actas por infracción administrativa a la normativa citada.

De la pesca decomisada, dos toneladas fueron donadas a centros benéficos (San Juan de Dios, Obra Social y Desarrollo y Aldeas Infantiles, entre otros), mientras que el resto fue destruido en cebaderos en alta mar.