El Ayuntamiento de Santiago exige a los trabajadores de basura el cese de actos "semiterroristas" y rechaza "chantaje"

Estima en unos 24.000 euros el valor de los 30 contenedores quemados la pasada noche y cifra en 600 toneladas las acumuladas en las calles

La concejala de Servizos, Marta Álvarez-Santullano, exigió hoy a los trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de recogida de basura y limpieza de Santiago que cesen los actos "semiterroristas" registrados —quema de contenedores— en los últimos días porque "ponen en riesgo a los ciudadanos".

En rueda de prensa, la concejala insistió en que "no es una huelga contra el Ayuntamiento ni la empresa, sino contra los ciudadanos" y cifró en unos 24.000 euros el valor de la treintena de contenedores quemados la pasada noche, coincidiendo con el inicio de la décima jornada de huelga, al costar unos 800 euros cada uno.

Al respecto, puntualizó que la quema de algunos contenedores se realizó cerca de un colegio en un caso, de viviendas en otros y de un coche estacionado. "Es intolerable e indefendible", dijo, al tiempo que exigió al comité de huelga que se pronuncie —en una rueda de prensa previa se desvinculó de los incidentes— y añadió que los sucesos "no son fortuitos".

Tras denunciar el comité de huelga una "campaña de acoso" por parte del Ayuntamiento, Álvarez-Santullano recalcó que el gobierno local "traslada hechos objetivos". "Hay informes de los bomberos y de la Policía", apostilló. "No nos podemos someter al chantaje que pretende", afirmó la edil e insistió en que es una situación "inaceptable e intolerable".

Asimismo, advirtió de que "al final se va a detener a alguien" y se van "a tomar las medidas oportunas". "Después que nadie se lleve las manos a la cabeza", avisó.

Servicios mínimos

La concejala apuntó que hay unas 600 toneladas de basura acumuladas en las calles de Santiago, por lo que el Ayuntamiento elaboró un nuevo decreto de servicios mínimos que no fija un porcentaje —actualmente era el 50%—, sino que señala que la empresa disponga del personal "necesario" para que no haya en la vía pública más desperdicios que los correspondientes a cuatro días —unas 480 toneladas—.

"No podemos que el derecho a la huelga entre en colisión con el derecho a la salud y el medio ambiente", justificó la edil y aclaró que el Ayuntamiento no pagará los servicios "que no se presten". "Ya se hizo en el año 2005", recordó.

Por ello, reiteró que el nuevo decreto establece que la empresa "disponga de todo el personal necesario para paliar una situación de riesgo para la salud pública y el medio ambiente" porque con la subida de las temperaturas "no se puede aguantar basura acumulada de más de cuatro días".

En cuanto al cumplimiento de los servicios mínimos, la concejala explicó que en "algún caso" los trabajadores recogieron "menos del 50% de un día normal", lo que calificó de "tomadura de pelo a los ciudadanos". Al respecto, puntualizó que ayer movieron unos 30-40 contenedores de sitio en el Ensanche para que el camión "ralentizara" la recogida.

Asimismo, pidió al comité que deje de "mentir" al decir que las reivindicaciones "no eran económicas". "Pedían hasta 600 euros de subida lineal en el salario base", argumentó la concejala y tachó de "incoherente" la conducta de los trabajadores en huelga. "El Ayuntamiento hace lo que tiene que hacer", añadió y dijo que los técnicos municipales elaboran un informe para constatar si hay los incumplimientos del pliego de condiciones que denuncian los trabajadores.

Álvarez-Santullano incidió en que se trata de la huelga de basura "más larga" en Santiago e incluso en la comunidad y señaló que se trata de una "conducta habitual", apuntando que el próximo día 24 empezará otra en A Coruña y en próximos días en Ourense.

Finalmente, preguntada por la solicitud de dimisión por parte del comité de empresa de Urbaser, la edil replicó que "no es la primera vez que la piden". "Sólo la puede hacer efectiva el alcalde. Que sepa no lo tiene pensado", sentenció.

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