El juzgado de Redondela ha abierto diligencias para determinar si hubo responsabilidad penal en la muerte de un niño de 23 meses que fue atacado por un perro de raza pitbull en una finca del barrio de Mosteiro, en el municipio pontevedrés de Pazos de Borbén.

Según confirmaron fuentes judiciales a Europa Press, el juzgado ha iniciado la investigación para determinar si se imputa a algún familiar por el fallecimiento del niño, para lo que se estudiarán los atestados de la Guardia Civil, así como el informe de la autopsia practicada al perro —que fue sacrificado momentos después de los hechos por el abuelo del niño fallecido—.

El ataque del perro tuvo lugar en la tarde del sábado cuando, según fuentes de la Guardia Civil, el menor —que había ido a pasar el fin de semana a casa de sus abuelos— se habría acercado a una zona cerrada en la que estaba el perro. El can —propiedad del padre del menor— atacó al niño, que fue trasladado en helicóptero al Hospital Xeral, donde falleció como consecuencia de las graves heridas que sufría.

Las mismas fuentes confirmaron que el abuelo del niño sacrificó al perro —con microchip y registrado en el Ayuntamiento de Vigo—, que fue recogido por la Policía Judicial de Vigo y trasladado a una clínica veterinaria de Redondela para la realización de la autopsia.