Socialistas y Compromís reclamaron hoy en las Corts Valencianes en el marco del debate del proyecto de ley de Régimen Local de la Comunitat Valenciana que se replantee la "arquitectura institucional" ante el momento económico actual y se deje la existencia de las Diputaciones Provinciales "bajo mínimos". Por su parte, los populares argumentaron que no creen que el "maravilloso modelo" de "Diputaciones que no son Diputaciones" se pueda abordar "sin tener en cuenta el régimen común de todos".

El diputado socialista Ximo Puig, defendió en la Comisión de Gobernación y Administración local que "ahora que estamos en situación de crisis" hay que "repensar la arquitectura institucional" y "aprovechar el momento".

Así, reclamó que las Diputaciones Provinciales existan "bajo mínimos" porque están "fuera del momento histórico", son "burocratizantes" y necesitan "una reforma en profundidad" para quedarse como una red de apoyo a los ayuntamientos porque representan una economía "no asumible" y un "instrumento político, clientelar, partidista y antiguo".

Por su parte, el portavoz de Compromís, Enric Morera, indicó que en este momento "no tiene sentido la solapación de administraciones locales y diputaciones provinciales" y reclamó que sus competencias estén delimitadas al interés de los ayuntamientos.

El diputado popular César Augusto Asencio, admitió que "todo se tiene que adaptar a la situación a medida que se evoluciona", pero remarcó que estas instituciones están aplicando planes de austeridad.

También indicó que las Diputaciones existen por "mandato constitucional" y señaló que cuando gobernaron los socialistas "deberían haber solucionado esta cuestión" y encontrar la "fórmula mágica y no lo ha hecho". Así, criticó que "ahora se nos pide una revolución local a una ley que viene acotada por la ley estatal que tenemos que tener como referente".

Igualmente, agregó que en referencia al personal funcionario que trabaja en las Diputaciones que "hasta que no se jubilen o pasen otras circunstancias" se supone que "hay una vida útil de mucho personal al que hay que sacarle rendimientos".

Asencio destacó que la norma es pionera en regular el registro de Bienes y de Actividades de alcaldes y concejales, —que tendrá carácter público—, y establecer que sus cuentas sean auditadas por el Síndic de Comptes.

Por otra parte, el socialista Ximo Puig advirtió que esta norma no puede ser un "nuevo intento fallido" respecto a la financiación de los municipios, a través de un Fondo de Cooperación Municipal financiado con cargo a los presupuestos de la Generalitat, porque si no, la nueva norma nacerá "vacía". Puig lamentó que la Generalitat adeuda a los municipios 2.000 millones de euros.

Los socialistas reclamaron que la cuantía inicial del Fondo de cooperación municipal de la Comunitat Valenciana estuviera formada por un porcentaje igual al 2,5 por ciento de las cantidades resultantes por todos los conceptos en el presupuesto consolidado de ingresos de la Generalitat, sin que en ningún caso la cantidad pueda ser inferior a trescientos millones de euros.

El diputado popular le replicó que "no se puede improvisar" una partida y aseguró que los números propuestos por los socialistas coloca "uno de los techos más altos" para financiar el fondo, a pesar de ser una de las autonomías "peor tratadas" por el Gobierno Central

Carta municipal de valencia

Además, la comisión aprobó por unanimidad una enmienda transaccional a una iniciativa del grupo parlamentario socialista en la que se expresa que en plazo de tres meses desde la entrada en vigor de la ley se creará una comisión mixta integrada por representantes de la Generalitat y del ayuntamiento de Valencia que tendrá por objeto el estudio y elaboración de una Carta Municipal de Valencia, que estará redactada en el plazo máximo de un año desde su constitución.

En ese momento, prosigue la transaccional, se pondrán en marcha las medidas legislativas a nivel estatal conducentes a dotar a la ciudad de Valencia de un régimen municipal especial que regule un régimen financiero especial para el ayuntamiento de Valencia. En el debate también se aprobaron cinco enmiendas presentadas por el PP, una de Compromís, otra del PSPV y otra, por unanimidad, de aproximación.

Por su parte, el portavoz de Compromís, Enric Morera, señaló que ésta es la "ley más importante de esta legislatura" y recordó que su grupo ha presentado más de 50 enmiendas, pero criticó que el texto es "poco ambicioso" y "poco valenciano".

Morera también advirtió sobre el "ataque directo a la pluralidad" que responde "a la mentalidad de partido único" que supone a su juicio, exigir un número mínimo para la composición de un grupo político municipal, y el PP le aceptó la enmienda en la que se reclamaba que se eliminara esta directriz.

La portavoz de No Adscritos, Marga Sanz, indicó que esperaba que el PP demostrara la voluntad de diálogo que expresó en el pleno para que sea "una ley que nos represente a todos".