((Esta noticia sustituye a la anterior por un error en la fuente informante en el primer párrafo de la noticia))Los familiares de usuarios de centros geriátricos denuncian negligencias y mala atención por falta de personalNace AVAFURCEG para mediar en las quejas y trasladarlas ante la Conselleria de Bienestar Social o los juzgados

Los familiares de los usuarios-residentes de los centros geriátricos denuncian que la falta de personal cualificado y un escaso ratio de auxiliares en estas residencias conduce a negligencias importantes, como errores en la medicación, y a la falta de una atención de calidad.

Difundir estas carencias e intentar arreglarlas son los principales objetivos de la Asociación Valenciana de Familiares de Usuarios-Residentes de Centros Geriátricos (AVAFURCEG), que hoy se presentó en rueda de prensa, y que tiene ya más de un centenar de asociados en toda la Comunitat Valenciana.

Al respecto, José Miguel Giménez, vocal de esta nueva asociación, explicó que esta asociación no pretende que se cierre ninguna residencia ni presionar a sus trabajadores, sino arreglar las deficiencias. Por ello, en primer lugar hablan con la propia dirección del centro pero si "hacen caso omiso" se remiten a la Conselleria de Bienestar Social y si la negligencia es muy grave "no tenemos ningún inconveniente en llevarla incluso a los juzgados".

En ese sentido, destacó que la actitud de la Administración, que "sí que ha respondido para hablar con los centros para solucionar los problemas", mientras que criticó que las residencias "piden más tiempo cuando nosotros sí tenemos tiempo, pero nuestros familiares en muchos casos no".

Hasta el momento, apuntó, durante el mes de vida de esta asociación, ya han recibido cerca de media centenar de denuncias, principalmente de Castellón y Valencia, a las que se deben sumar las quejas telefónicas que no se contabilizan hasta que se formalizan.

Al respecto, constató que las quejas por estas carencias se reproducen en todas las residencias con independencia de su titularidad. Así, expuso que ya sean centros públicos, privados o concertados en su mayoría el ratio de auxiliares por cuidadores, 2 por cada 9 usuarios, aunque legal es "claramente insuficiente y no es moral", lo que se traduce en desatenciones en los cuidados asistenciales diarios, en el aseo personal, la calidad y administración de comida, apoyo psicológico y social o rehabilitación en fisioterapia o terapia ocupacional.

En ese sentido, reclamó que no se contabilice sólo el número de residentes para establecer la ratio sino que se tenga en cuenta la situación de dependencia de cada uno de ellos y que esta valoración se actualice con el paso del tiempo. "Basta con tener en cuenta que para levantar a una persona de una silla de ruedas se necesitan dos personas", dijo.

En ese sentido, Ana María González, secretaria de la asociación, constató que las residencias son un recurso intermedio entre la familia y un hospital, por lo que deben tener "personal preparado" y además tener muy presente que "se está hablando de personas, no de muebles". "Necesitan una atención digna, no pedimos que les besen, pero sí que les mimen y respondan a todas sus necesidades de cuidados como limpiarles las gafas o vestirlos adecuadamente", dijo,