La bicicleta no está especialmente asentada como medio de transporte en la capital vizcaína. Tan sólo un 4% de los desplazamientos por la ciudad se hacen por medio de la bicicleta.

Bilbao, con 13,2 kilómetros de carriles-bici, sigue a la cola de las tres capitales vascas en la construcción de bidegorris. Además de ello, el principal problema es la escasa continuidad de los tramos especiales para bicicletas.

La mayoría de los desplazamientos de los bilbaínos son, en todo caso, a pie. El 65% de ellos se mueven andando por la ciudad. Otros muchos lo hacen en coche. Unos 128.000 vehículos acceden a Bilbao en automóvil, una cifra que aumenta año a año. Además, cada coche sólo lleva de media a 1,1 pasajeros.