De hecho, la campaña de recogida de aceituna, que comenzará en los próximos días, prevé una cosecha aproximada en la provincia de 56.000 toneladas, un 45% menos respecto a la anterior, debido, principalmente, a la pérdida de olivos por las heladas. Ha sido en Granada donde más se ha notado este descenso, si bien seguirá siendo la tercera en volumen de toneladas tras Jaén (donde esperan alcanzar 230.000) y Córdoba (170.000 toneladas).

Pero la ola de frío no sólo ha afectado a la cosecha granadina. Excepto Jaén, que sigue siendo la primera productora de aceite del mundo (con una caída del 27%), las producciones de las otras provincias andaluzas sufrirán una bajada del 20%.

Los precios, por las nubes

La producción de esta campaña será menor, pero es que la del año pasado también fue más reducida que la anterior. Y las más elementales leyes económicas dicen que, a menor producción, mayores precios. Ahora mismo, antes incluso de que empiece la recogida, resulta difícil hallar en las tiendas un litro de aceite de oliva virgen por debajo de los 4 euros (sólo algunas marcas blancas de híper y supermercados), y en algunos casos los precios están más cerca de los cinco euros.