La delegada provincial de Empleo, Irene Sabalete, que inauguró el encuentro, el primero que se hace en la prisión, destacó que esta iniciativa se enmarca en el programa 'Acompañamiento a la inserción sociolaboral de la población reclusa' que realiza la Junta en colaboración con el Gobierno de la Nación y cuyo objetivo es promover el acceso al mercado laboral de reclusos que a corto o medio plazo van a reincorporarse a la vida social en libertad.

La delegada explicó que los internos conocieron, de la mano de empresas y entidades colaboradoras, como Guillermo García Muñoz, Eulen, Andalucía Emprende y la Cámara de Comercio de Jaén, la actividad que desarrollan, los puestos y la cualificación requerida en la actualidad o las habilidades necesarias para cada ocupación.

Cada empresa mostró los perfiles más demandados actualmente en la provincia, que se enmarcan dentro de los sectores emergentes, como son las energías renovables, el medio ambiente, o todo lo relacionado con la Ley de la Dependencia, entre otros. También se les orientó sobre la creación de empresas y el autoempleo, sobre los recursos que hay para formarse y para acceder al mundo laboral.

Sabalete detalló que a esta jornada empresarial asistieron los 20 reclusos que participan en el programa de 'Acompañamiento a la inserción sociaolaboral de la población reclusa', otros 15 del curso de mantenimiento y montaje de instalaciones solares y otros 15 de la unidad terapéutica educativa que están realizando un curso de auxiliar de agricultura. El encuentro concluyó con una visita a los talleres productivos que desarrollan los reclusos en la prisión.

Además de estos dos talleres de instalaciones solares y agricultura, se desarrollan otros como el de confección y el taller productivo para Teknia Plásticos Martos, a los que se suman los convencionales, como el economato, cocina, mantenimiento, subalternos, limpieza, lavandería o actividades auxiliares. En total, algo más del 20 por ciento de los internos participa en los talleres de producción para el exterior o en los talleres convencionales.

Avanzar en la inserción

La delegada hizo hincapié en la relevancia de este programa para avanzar en la inserción de los reclusos que pronto estarán en libertad, que se incluyen en los colectivos con especial dificultad para acceder al mundo laboral. En este sentido, comentó que el perfil de los internos es el de un nivel educativo bajo, de ahí la importancia de incidir en la formación como clave para acceder a un empleo. Si bien el 70 por ciento inicia algún tipo de formación, sólo un 11 por ciento lo finaliza. Por tanto, insistió en que "hay que seguir apostando por la formación para el empleo para acceder a un buen empleo".

Por otro lado, anunció que próximamente —y dentro de la programación formativa de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (FAFFE), entidad adscrita a la Consejería de Empleo— van a iniciarse dos cursos en los que participarán 30 reclusos: uno de experto en limpieza de inmuebles, que se impartirá en la prisión provincial, y otro de instalaciones de energías renovables en edificios, que tendrá lugar en el Cefitema, en el Centro de Formación e Innovación Tecnológica de la Madera de Huelma.

La delegada señaló que este año se desarrolla la segunda edición de este programa que cuenta con un presupuesto de 49.795 euros y que se enmarca en el convenio de colaboración de FAFFE con el Organismo Autónomo de Trabajo Penitenciario y Formación para el Empleo (del Ministerio del Interior). Irene Sabalete ha subrayado, para concluir, que este programa busca la inserción laboral de este colectivo mediante un enfoque integral, con una tutorización individualizada hacia cada recluso, al que se le diseña un itinerario personalizado hacia el empleo.