Fuentes del caso informaron a Europa Press de que la acusación particular solicita para el alcalde de Morón de la Frontera un año de cárcel y siete de inhabilitación por cada uno de los tres presuntos delitos del artículo 320.1 del Código Penal, que hace referencia a "la autoridad o funcionario público que, a sabiendas de su injusticia, haya informado favorablemente proyectos de edificación o la concesión de licencias contrarias a las normas urbanísticas vigentes".

De igual modo, la acusación particular pide para Morilla un año de prisión por un presunto delito del artículo 329.1 del Código Penal, referente a "la autoridad o funcionario público que, a sabiendas, hubiera informado favorablemente la concesión de licencias manifiestamente ilegales que autoricen el funcionamiento de las industrias o actividades contaminantes". Por su parte, el letrado de la asociación vecinal solicita para el ex alcalde José Párraga (PSOE), que también será juzgado hoy, dos años de cárcel e inhabilitación durante 14 años.

De su lado, la Fiscalía de Medio Ambiente, Urbanismo y Patrimonio Histórico solicita para ambos acusados un año y seis meses de prisión, así como inhabilitación especial para cargo público durante nueve años por un presunto delito continuado contra la ordenación del territorio.

Tanto Morilla como Párraga han sido citados a declarar por el Juzgado de lo Penal número 5 de Sevilla mañana viernes día 7 de mayo a partir de las 11,15 horas, informaron las mismas fuentes consultadas por Europa Press.

La denuncia

Hay que recordar que, en su denuncia, la asociación vecinal de Morón 'La Alameda' criticaba el "brutal" ruido que los residentes de las zonas anexas al recinto, en las naves 7 y 8 de la carretera de la Alcoba, "vienen soportando desde 2001".

Pese a que en el lugar puede constatarse la presencia de "alguna pequeña industria", el terreno es "no urbanizable", por lo que los vecinos decidieron denunciar el hecho de que en dicho terreno estuviera funcionando, entre otros, un aparcamiento de vehículos pesados.

A esto, según añadían los denunciantes, se suma el hecho de que tanto Párraga como Morilla concedieron actividades de licencia a varios negocios en la zona, pese a los informes negativos del arquitecto municipal y de la Secretaría del Ayuntamiento, "que desaconsejaban y rechazaban la concesión de licencias".