Dos jóvenes de 23 y 22 años se enfrentan a una suma de 9 años y medio de cárcel, acusados de varios delitos, por entrar a robar en una vivienda de Gijón, y herir a sus propietarios sirviéndose de pistolas y defensas eléctricas no autorizadas. La vista oral se celebrará en el Penal 2 de Gijón el lunes, 10 de mayo.

Según el relato de los hechos de la Fiscalía, el primero de los jóvenes, vecino de Gijón, se dirigió en compañía de otras dos personas al interior del inmueble con el pretexto de resolver un problema de fontanería que afectaba a un piso vecino. Una vez allí, le propinó un puñetazo en la cara al morador y varias descargas eléctricas para inmovilizarlo y exigió que, junto a su pareja, le entregasen el dinero y los objetos de valor.

Finalmente, lograron apoderarse de dos teléfonos móviles, dos carteras, tarjetas bancarias y un reloj, tasado todo ello en 295 euros. Como consecuencia de las agresiones, el hombre sufrió erosiones y heridas de las que tardó en curar 21 días y la mujer un episodio de nerviosismo del que se repuso en ocho días, durante los que también estuvo incapacitada.

Entre los meses de diciembre de 2008 y febrero de 2009, el segundo de los acusados adquirió al primero uno de los teléfonos robados, de la marca Nokia por 30 euros.

El primero de los acusados, en prisión provisional y al que le constan antecedentes por hurtos, robos y resistencia a los agentes, está acusado de tres delitos de allanamiento de morada, robo con violencia e intimidación y tenencia ilícita de armas y de dos faltas de lesiones. Al segundo se le considera responsable de un delito de receptación, por el que le solicitan un año y tres meses de cárcel.

En concepto de responsabilidades civiles, el primero deberá indemnizar a la mujer en 215 euros por los efectos sustraídos y en 480 euros por las lesiones y daños y al hombre en 1.260 euros por las lesiones y los días de incapacidad.