El PNV se ha quedado prácticamente solo en su apuesta por la carrera. La única posición por decidir es la del PP bilbaíno, que ha condicionado su apoyo a la presentación, por parte de los responsables del evento, de un patrocinio sólido y de un circuito urbano con las mínimas afecciones para los ciudadanos.
El PNV anunciará su decisión dentro de unos días, aunque el alcalde, Iñaki Azkuna, adelantó que el consenso político era «fundamental» para llevar a cabo una nueva carrera de bólidos por las calles de Bilbao. Todos los grupos apoyaron el evento el año pasado.
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