Durante la presentación de los nuevos uniformes, el comisario jefe de la Policía Nacional en Teruel, Valentín Solano, declaró que desde los años ochenta no se habían producido cambios en la uniformidad del Cuerpo.

En lugar de la gorra de plato, los policías llevarán a hora una de tipo béisbol azul marino; las camisas grises han sido sustituidas por camisas polo (con botones falsos), también azul marino; el pantalón recto azul marino pasa a ser un pantalón con bolsillos exteriores en las perneras. Por último, los zapatos negros, se han sustituido por botas.

Además, se han introducido otras modificaciones. La placa metálica es ahora de PVC y va pegada a las prendas, con un rectángulo en su parte inferior para introducir el número profesional.

También se ha modificado el diseño del distintivo del brazo con el emblema del Cuerpo Nacional de Policía. Ahora se puede ver tanto por la parte delantera, como por la trasera y en los laterales del uniforme del agente, "para que no haya dudas", indicó el comisario Solano.

Por su parte, la subdelegada del Gobierno en Teruel, María Victoria Álvarez, señaló que los cambios se deben sobre todo a cuestiones de seguridad aunque "es inevitable ver el lado estético". Aún así insistió en la importancia que tienen los cambios en materia de riesgo laboral para lo que "se ha eliminado la corbata, los bolsillos de los pantalones, los botones para evitar desgarros y la gorra, que no se les va a caer al correr".

En este sentido, Solano agregó que "se habían observado muchas deficiencias en la uniformidad que teníamos y era necesario un cambio para facilitar nuestra labor policial". En cuanto al uniforme de gala, se mantiene el utilizado hasta ahora.

También se han cambiado los vehículos, el color dominante ahora será el azul marino y el emblema será más moderno. En el interior se colocará un cristal de seguridad que separa al detenido de los agentes. En este caso el cambio será paulatino, por lo que hasta dentro de unos meses convivirán los dos modelos.

En la actualidad, la plantilla policial de Teruel cuenta con un total de 101 agentes, aunque debería ser de 114, por lo faltan 13 puestos. En cuanto a los vehículos existen un total de 14 uniformados y 12 no uniformados que "son más que suficientes para la tarea que desempeñamos", concluyó Valentín Solano.