El presidente de Caja Badajoz, Francisco García Peña, estimó hoy que el acuerdo alcanzado ayer entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy, para reformar la ley de cajas antes de tres meses es un "gesto importante en unos momentos difíciles".

En cuanto a la entrada de capital privado indicó que le parecía bien que entre con "limitaciones" y es entendido como un "instrumento más para favorecer el modelo". Deberían ser limitaciones, explicó, que "no permitieran que al final las cajas acabaran en manos privadas".

García Peña explicó que en el momento actual el "problema fundamental de la economía mundial y particularmente la española no puede ser achacable a las entidades financieras", sino "todo lo contrario", ya que las entidades que conforman el sistema financiero español "han estado a la altura de las circunstancias y han podido soportar y apoyar" a empresas y ciudadanos para hacer "más llevadera esta crisis".

Añadió que "hasta la fecha" no ha habido "como consecuencia de la crisis necesidad de intervenir" ni en el ámbito de las cajas ni en el bancario, lo que a juicio de García Peña demuestra que España posee "un sistema financiero muy sólido y muy capaz de afrontar dificultades".

El presidente de la caja pacense hizo estas declaraciones al ser preguntado sobre el encuentro Zapatero-Rajoy en el transcurso de una rueda de prensa en la que firmaba un convenio cultural junto al presidente de la Diputación de Badajoz, Valentín Cortés.

Señaló García Peña que es "cierto" que la crisis "ha puesto de manifiesto nuevas necesidades"que tienen que ver el establecimiento de entidades con "mayor fuerza y mayor dimensión capaces de afrontar el futuro que se nos avecina", un futuro en el que dijo el modelo de desarrollo de desarrollo "va a tener que cambiar" y las entidades financieras "tienen que adaptarse a esa nueva solución".

Declaró que esto es lo que él entiende que tanto Zapatero como Rajoy habían "pretendido transmitir" con el encuentro celebrado ayer en Moncloa. "Dar tranquilidad a los ciudadanos" en el sentido de que las cajas como una parte "fundamental" del sistema financiero español "van a afrontar esta nueva etapa de una forma decidida y consensuada", consideró García Peña.

Valoración positiva

Así, subrayó que desde Caja de Badajoz se valora "muy positivamente" el encuentro de ayer, "independientemente" de que al margen de lo publicado en los medios de comunicación "poco" se puede "entrar a valorar" ya que las "cuestiones que se han planteado son a título muy general".

Al respecto, dijo también que los dos o tres próximos meses van a ser "trascendentales", pues va ser el momento "en que se va a proceder a las modificaciones legislativas" que abran la "oportunidad a la cajas de tener esa presencia en el ámbito financiero de manera distinta" a la que hasta ahora han tenido, de modo que será preciso estar atentos a todo el desarrollo de las normas que van a regir las cajas en el futuro.

Matizó que para él hay un ámbito "importante que destacar", como es que "nadie ha puesto en cuestión, en absoluto, el modelo" de cajas de ahorro, y que las modificaciones que se produzcan en la ley "van a ir a apostillar" dicho sistema, que ha funcionado y ha dado respuestas al ámbito institucional, empresarial y familiar.

Subrayó, por tanto, que el modelo de cajas "no está en cuestión" y que ha dado "satisfacción", de modo que de lo que se trata es de ir "introduciendo algún matiz" para adaptarlo a los nuevos tiempos para "conservarlo" en la nueva ley.ALIANZAS

Sobre la cuestión de las fusiones y los SIP, el presidente de Caja de Badajoz afirmó que está "suficientemente explicitado" en las "indicaciones" del Banco de España que son mecanismos necesarios para que las cajas españolas tengan "mayor solvencia y capacidad de respuesta". Agregó, en consecuencia, se tiene "que acudir necesariamente" a alianzas entre las cajas para poder participar en proyectos más grandes.

En este sentido detalló que la nueva norma servirá para "facilitar" este tipo de procesos y "cuando menos sean más rápidos". "Bienvenida sea una norma que clarifique estas situaciones y favorezca el desarrollo de estas integraciones", apuntó.

Sobre el caso concreto de Caja de Badajoz, explicó que la entidad tiene un modelo de negocio "muy consolidado" y con "solidez" en los indicadores más importantes que la sitúa en una posición "de fortaleza para poder determinar sin prisas, pero sin pausa, cuales serían los compañeros de viaje más adecuados".

Así, para García Peña esos posibles compañeros de viaje son cajas no muy grandes de dimensión, con un modelo de gestión y liquidez "parecida", perfil con el que "hoy por hoy" hay muchas entidades de ahorro en el ámbito nacional.

Por eso, dijo, "en este momento se están conformando determinados grupos que están hablando para en un futuro" poder establecer alianzas de tipo SIP, ámbito en el que declaró que Caja de Badajoz "está expectante" y manteniendo conversaciones "con muchas cajas".

En cuanto a una posible coincidencia con Caja de Extremadura, recordó que la postura de Caja de Badajoz es no descartar "ninguna posibilidad", pues las dos cajas extremeñas están en "buena posición para acudir a este tipo de soluciones" y no descarta "estar en un mismo grupo" de entidades que se alían vía SIP.POLÍTICOS

Finalmente, se preguntó a Francisco García Peña sobre su postura ante las voces que piden limitar la presencia de políticos en las cajas de ahorro y la posibilidad de entrada de capital privado en las mismas.

Así, sobre la presencia de políticos indicó que cree que el modelo de cajas "hasta ahora" ha sido un sistema que "ha funcionado" con una estructura de órganos de gobierno donde una parte corresponde a las entidades locales y "determinados políticos". Para García Peña, si ha funcionado "quiere decir que la cosa ha ido bien".

Para el presidente de Caja Badajoz la cuestión es que si se dice que hay que modificar el modelo hay que puntualizar por quién se van a sustituir a esos consejeros y órganos de gobiernos representados por las entidades locales, a lo que agregó que "de entrada decir que la política no cabe" en las entidades de ahorro "no tiene mucho sentido" pues ha tenido su cabida y "ha funcionado". Puntualizó así mismo que aunque haya habido cajas que "no han dado un ejemplo muy digno", han sido casos "puntuales".