Precisamente, la Xunta tiene previsto iniciar mañana jueves diferentes trabajos para reforzar con una doble línea de bandas rugosas en la separación de los sentidos de circulación y, además, solicitó también a la Dirección General de Tráfico (DGT) una "mayor presencia" en la vía por parte de las fuerzas de seguridad y la colocación de radares fijos.

El último siniestro, ocurrió sobre las 20.50 horas de hoy, en esa carretera, cuya denominación es la CG-4.1, y une Rande PO-551 con Cangas. Concretamente, tuvo lugar a la altura del kilómetro 2,1, en el término municipal de Moaña.

Según informaron fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, el siniestro consistió en una colisión fronto-lateral de dos turismos, y posterior choque contra una valla de protección del margen izquierdo de uno de ellos, un vehículo modelo Citroën-Saxo, cuyo conductor y único ocupante resultó fallecido.

Por su parte, la conductora y única ocupante del otro vehículo implicado, un turismo Volkswagen-Golf, resultó ilesa, según indicaron las mismas fuentes.SINIESTRALIDAD

La Xunta recordó hoy que desde que entró en funcionamiento esta vía, en 2005, y hasta finales de 2009 se habían registrado 43 accidentes con una fallecido, 18 heridos graves y 72 leves, con desplazamientos superiores a los 16.000 al día desde 2007.

Sin embargo, indicó que desde el inicio de 2010 se produjeron seis accidentes con víctimas, con un balance de siete fallecidos, siete heridos de consideración grave y cuatro leves. A estos, hay que sumar el siniestro ocurrido esta tarde, con lo que ya son ocho las víctimas mortales.

Con respecto a las causas de los siniestros contabilizados en lo que va de año, según los partes de la DGT, en el 42% de los casos se debieron a la infracción de la norma de circulación; un 26% a distracción; un 12% a la velocidad inadecuada; un 7% al cansancio o sueño; y un 5% al alcohol o drogas.