Según informó la CHC a través de una nota de prensa, el protocolo plantea varias disposiciones principales que conllevan la actuación por parte de los dos organismos implicados en la firma.

Uno de los aspectos es la recalificación urbanística de los terrenos afectados por los corredores fluviales. Para ello el Ayuntamiento de Ribadesella adaptará su Plan General de Ordenación Municipal, de tal modo que los Corredores Fluviales se incluyan en la categoría de Suelo Rústico de Protección de Espacios Naturales. Asimismo se impedirá cualquier uso en los Corredores Fluviales que implique un incremento significativo de la exposición y vulnerabilidad frente a posibles inundaciones. También se incluyen la protección urbanística de los corredores fluviales, la protección urbanística de las zonas torrenciales.

Con el fin de conseguir los objetivos previstos en el protocolo, tanto la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, como el Ayuntamiento de Ribadesella, en el ámbito de sus competencias, colaborarán en actuaciones como la conservación de cauces y la participación ciudadana.