Según informó en un comunicado la gerencia del parque, el plan prevé poner en marcha diferentes acciones de marketing "en las principales zonas agroindustriales de España", aunque se hará especial hincapié en contactar con empresas radicadas en Andalucía y la Comunidad Valenciana.

Asimismo, la idea es atraer hacia este complejo a las empresas agropecuarias de la comarca de la Axarquía, en la que está instalado el parque y que es una de las principales zonas productoras de frutos subtropicales de Europa.

En la nota, los responsables del parque lo señalan como "una excelente alternativa empresarial, al convertirse en un entorno aglutinador del tejido agroindustrial de la Costa del Sol, al tiempo que apuesta por la calidad y especialización del sector agrícola y la creación de empleo de calidad".

En este sentido, las previsiones apuntan a que, en los próximos cinco años, el parque genere una inversión empresarial de más de 70 millones de euros, y posibilitará la creación de más de 2.000 puestos de trabajo directos e indirectos.

Del mismo modo, se considera que el complejo favorecerá en gran medida a las empresas del sector agroalimentario y a las auxiliares "gracias a la innovación, a la aplicación de las nuevas tecnologías y a las sinergias que nacen de la colaboración de empresas del mismo sector".

El Parque Tecnoalimentario de la Costa del Sol-Axarquía, cuya urbanización ha tenido un coste de 20 millones de euros, tiene capacidad para albergar 39 empresas del sector agroalimentario y se levanta sobre una superficie de 232.000 metros cuadrados, situada en el núcleo de El Trapiche, entre el aeródromo Leoni Benabú, la carretera de acceso a Benamargosa y la carretera A-356.

Según indica la nota, la empresa promotora del parque estará en disposición de vender en los próximos meses las parcelas del parque a las empresas agroalimentarias interesadas en implantarse en la tecnópolis.