El PSE-EE "salió hoy a la calle" en las tres capitales de la Comunidad Autónoma Vasca para celebrar el primer año de Gobierno de Patxi López, mediante el reparto de folletos informativos, en los que explican que los socialistas han pasado "el examen con nota alta".

El portavoz parlamentario y de la Ejecutiva del PSE-EE, José Antonio Pastor, aseguró que la salida de la crisis empieza a "repuntar" y ETA se encuentra "en la recta final de su existencia".

Durante el reparto de folletos informativos en Bilbao para explicar las principales actuaciones del año del nuevo Ejecutivo vasco, Pastor afirmó que los socialistas han salido hoy a la calle en Euskadi "para celebrar una efeméride importante: el primer año de gobierno socialista en Euskadi".

"Es el primer año del Gobierno del cambio del que podemos decir, sin ser triunfalistas, que es un balance positivo. Es bueno recordar como entró este Gobierno en 2009, con un desempleo que había subido los seis primeros meses del año más de un 50 por ciento y cómo nos encontramos ahora, con un decrecimiento del paro y, en el último mes, hemos conocido la buena noticia de 3.800 desempleos menos", manifestó.

Por ello, consideró que "se desmontan algunas falacias interesadas sobre supuestos destrozos provocados por este Gobierno, un gobierno que, no sólo se ha preocupado por los problemas reales de la Euskadi de verdad, poniendo encima de la mesa medidas muy potentes contra la crisis que están teniendo ya resultados concretos, sino que lo ha hecho con absoluta normalidad, y la ciudadanía ha aceptado con absoluta normalidad este nuevo Gobierno que tiene un balance positivo en otros aspectos".

"Se ha intensificado la lucha contra ETA y el esfuerzo por eliminar cualquier espacio de impunidad. Hoy podemos decir también que ETA está peor que nunca y en la recta final de su existencia", aseveró.

Según apuntó, "todo esto se ha hecho en un contexto de crisis económica con unos presupuestos con una importante reducción de recaudación de ingresos que, sin embargo, no han supuesto ni una merma de derechos sociales, con una apuesta decidida por educación, por la investigación y la economía del país".

Balance positivo

"En cualquier caso, el balance no puede ser más que positivo y, como decía ayer el lehendakari, Euskadi está mejor de lo que estaba hace un año. La salida de la crisis parece que empieza a repuntar, los datos así lo indican, tanto el crecimiento del sector industrial como el aumento de las hipotecas o el crecimiento del empleo, avalan que este Gobierno está acertando tomando, medidas en el día a día.

Pastor afirmó que las cosas que hay por mejorar le corresponde decirlo a la oposición, que debe criticar lo que considere que no se ha hecho bien el Ejecutivo. "Los primeros meses tuvimos necesidad de tomar tierra en una Administración nueva, que había sido gobernada durante 30 años por el PNV, y eso obligó a tomar determinadas decisiones y a conocer realmente la realidad de lo que nos encontrábamos", dijo.

En su opinión, "rápidamente, este Gobierno adoptó velocidad de crucero y ya en diciembre del pasado año se puso en marcha el Plan Euskadi 09 para aliviar una situación económica que era francamente delicada". "Evidentemente las cosas siempre pueden ser mejorables, se pueden hacer mejor, pero creo que este Gobierno ha pasado este examen con una nota alta", destacó.

José Antonio Pastor señaló que el reparto de folletos informativos sobre el primer año de gestión del Gobierno socialista supone "un esfuerzo" para explicar a la ciudadanía vasca las actuaciones principales emprendidas por el primer Ejecutivo del PSE-EE. "Es evidente, que en este país todo huele siempre a clima preelectoral, pero no ha sido ése el motivo de este acto", aseveró.

Preguntado por la aprobación la semana pasada de un nuevo decreto del Gobierno vasco para regular la publicidad institucional, Pastor recordó que "esto se hace ya en el resto del Estado". "Aquí solíamos asistir en los últimos años a campañas de autobombo permanente, sobre todo por parte de las diputaciones forales, hasta el mismo día de las elecciones. De lo que se trata es de que el dinero público no se utilice para venta de intereses partidistas o autobombos complacientes", subrayó.

En esta línea, apuntó que, "otra cosa es que, después, cada formación política haga el esfuerzo, pero no con dinero público, por supuesto, de explicar a los ciudadanos lo que piensa que ha sido su gestión.