Sin embargo la cantidad de asuntos pendientes de resolución no ha variado mucho a lo largo del tiempo, en relación a lo que han variado los ingresos, ya que la cifra de los 183.002 de 1995 se ha mantenido muy similar a la de 2009, con 187.428, lo que se traduce en un incremento de tan sólo el 2,4 por ciento.

En lo que respecta al orden civil, se registraron 150.954 asuntos en 1995, y 338.752 (un 16,8 por ciento más), mientras que la pendencia ha aumentado un 55,4 por ciento desde entonces, pasando de 155.114 asuntos pendientes en 2005 a 241.088 en 2009, mientras que en el social el aumento de ingresados ha sido del 45,7 por ciento, ya que en 1995 se registraron 56.545 y en 2009 la cifra se situó en 82.410.

El aumento del número de asuntos ingresados en el orden civil en los dos últimos años, se explica, según detalló durante la presentación de la memoria el presidente del TSJA, Augusto Méndez de Lugo, por la situación de "extrema gravedad" que ha supuesto la crisis económica de carácter internacional que sufre la sociedad actual y que se traduce en conflictos que llegan de manera excepcional a los juzgados y tribunales.

Méndez de Lugo destacó como un cambio "cualitativo" en los últimos años la nueva Ley de Enjuiciamiento Civil, de 2000, "la ley procesal quizá más importante", y la nueva Ley Concursal bajo la que se crearon los Juzgados de lo Mercantil en 2004, en los que la crisis ha "incidido" especialmente y los ha "colapsado", por lo que, según incidió, "no dan una respuesta eficaz, rápida y de calidad" a los problemas que la situación económica, por la "avalancha de concursos" que registran.

Lo contencioso-ADMINISTRATIVO,

Lo que más ha crecido

La litigiosidad contencioso-administrativa es la que más ha crecido a lo largo de los últimos 14 años en Andalucía, Ceuta y Melilla (se ha triplicado con respecto a 1995, cuando se ingresaron 18.996, frente a los 62.936, un 231,3 por ciento más) y a pesar de los planes de refuerzo que han estado funcionando en la Sala y los nuevos juzgados creados bajo jurisdicción del TSJA (que han logrado que la resolución de asuntos sea cuatro veces mayor que en 1995) la cantidad de asuntos pendientes ha seguido un crecimiento prácticamente constante a lo largo de los años, y actualmente supera ya los 90.000 asuntos, frente a los poco más de 35.000 de 1995, lo que se deriva en un aumento del 158,4 por ciento de pendencia.

Así, aunque se prevé el comienzo de la implantación de la oficina judicial el próximo 4 de mayo en Andalucía, "seguimos contando con un modelo totalmente obsoleto, un modelo que no nos sirve, que nos encorseta, que no podemos seguir circulando con él", con una estructura "pensada para el siglo XIX" para una sociedad totalmente agraria, señaló el presidente, que dejará la carrera judicial el próximo 19 de julio.

Durante sus quince años al frente del TSJA, Méndez de Lugo estimó que el Alto Tribunal se ha "consolidado", ya que en sus inicios —nació en 1978 pero se puso en marcha en 1989— "era algo totalmente desconocido". "No sé si lo he conseguido, pero yo he querido vender, pateando toda Andalucía, el TSJA", señaló el presidente, que además consideró haber sido un "testigo incómodo" frente a la administración, demandándole "lo que necesitábamos".

Como otros aspectos positivos de su presidencia, destacó además la implantación de las nuevas tecnologías, como el sistema Adriano, o haber conseguido "buena sintonía" con las demás instituciones andaluzas. Aunque no le queda ninguna tarea, porque ya se marcha, sí señaló sin embargo que le hubiera gustado que el TSJA culminara la organización judicial en el territorio, la cerrara, "y que el Tribunal Supremo, como cúspide de esa vértice piramidal, sirva para sentar la doctrina que vincule todos los tribunales superiores de España".

Méndez de Lugo apuntó asimismo que, a lo largo de estos años, ha podido constatar que se hace un uso "excesivo" de la justicia, y abogó por una concienciación ciudadana de los altos costes que genera este servicio al contribuyente, cuando muchos de los asuntos planteados podrían resolverse por otras vías.