Según informó la Junta en un comunicado, el objetivo de este acuerdo es promover el desarrollo del sector de la madera y el mueble favoreciendo la formación en diferentes vertientes: diseño de nuevos perfiles competenciales demandados por el sector, formación continua de trabajadores en activo y reconocimiento y validación de competencias. Ésta es la primera vez que estas entidades firman este acuerdo que tendrá un periodo de duración de dos años.

Antonio Fernández puso de manifiesto que este convenio es un ejemplo de lo que significa el Cemer no sólo en Córdoba, sino en Andalucía y destacó que este centro es el principal interlocutor entre las empresas del sector y las asociaciones de la zona.

Fernández explicó que además de ser un centro de formación de excelencia, su actividad va mucho más allá porque "la labor de asesoramiento e impulso del sector es una de las líneas más importantes de trabajo, ya que como consorcio, es un instrumento de dinamización de los sectores productivos y económicos locales, desarrollando así una importante labor de recualificación, actualización y adaptación de los recursos humanos".

Según Francesc de Paula Pons, Confemadera y Cemer firman este convenio para fomentar la formación en este ámbito, ya que es uno de los "principales pilares para la competitividad del sector, porque sólo así se podrán alcanzar los niveles de excelencia empresarial precisos para mantenerse con posibilidades en el mercado, mejorar el desarrollo empresarial del sector, fomentar la internacionalización de las empresas y la cultura de la innovación y, en definitiva, posibilitar la creación de empleo de calidad".

El convenio centra la colaboración en formación de profesionales altamente cualificados facilitando su incorporación al sector de la madera y el mueble; formación a lo largo de la vida profesional en colaboración con las distintas asociaciones empresariales de Andalucía y de los diferentes focos productivos del sector de la madera y el mueble o competencias profesionales; entre otras cuestiones.

Entre las principales acciones a desarrollar dentro de estas líneas de trabajo está la elaboración de un estudio de las necesidades formativas del sector de la madera y el mueble de Andalucía; el diseño de los perfiles competenciales adecuándolo a las necesidades de las empresas; la realización de certificados de profesionalidad, a través de los cuales se reconozcan y validen las competencias profesionales adquiridas a través de la experiencia laboral o por vías no formales y acciones de apoyo a acompañamiento a la formación.